POR SOILA PANIAGUA
El ex presidente del Consejo Nacional de la Empresa Privada (CONEP), Celso Marranzini, dijo ayer que aunque la entrada en vigencia del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) implicará un mayor ajuste en el gasto público, también aumentará el flujo de recursos para los sectores productivos.

El dirigente empresarial también argumentó que la entrada en vigencia del acuerdo con el FMI, incidirá en que la banca internacional aumente su línea de créditos a la banca local, lo que, a su vez, incidirá en un aumento de los recursos frescos para los sectores productivos generadores de empleos.

Marranzini se expresó en esos términos, tras el anuncio de que el directorio del FMI aprobó el acuerdo stand-by y como parte del mismo, el Banco Central recibió ayer US$77.12 millones con lo que elevaría sus reservas brutas en US$1,053 millones.

Descartó que la población vaya a ser agobiada, por el momento, con nuevas cargas impositivas y afirmó que al país no le quedaba otra alternativa que firmar con el FMI, “después del manejo irresponsable que se le dio a la economía por cuatro años».

«Uno de los puntos positivos de un acuerdo con el FMI es que  obligan al país a organizarse, obviando el manejo medalaganario y alegre de las finanzas del Estado», sostuvo.

Otro aspecto positivo para Marranzini, del acuerdo con el FMI que entró en vigencia ayer, es la entrada de recursos frescos a la economía.

Agregó que tanto para los bancos internacionales, como para las agencias de crédito, la entrada en vigencia del acuerdo con el FMI, significa mayor confianza para el país.

Estimó que el índice de análisis de solvencia dominicano también mejora por efectos del acuerdo.

«Todos esos aspectos mejoran la inversión nacional y extranjera», puntualizó Marranzini, tras reconocer que el gobierno tendrá que ajustar sus gastos y administrar mejor los recursos del Estado.

«Lo negativo de un acuerdo son los constreñimientos, los impuestos que se deben colocar a la población, pero ya todas esas medidas fueron tomadas, cuando se hizo la reforma fiscal», añadió.

Afirmó que la población no debe tener temor a que se hagan nuevos ajustes que impacten negativamente los ingresos de los menos necesitados.

No obstante, reconoció que a la mayoría de la población no le gusta que se le hable de acuerdo con el FMI, pero añadió que ante el manejo irresponsable que se le dio a la economía por cuatro años, no había otra alternativa que acudir a ese organismo internacional.