POR SORANGE BATISTA
La Dirección de Persecución de la Corrupción Administrativa (DPCA) llamó a interrogatorio ayer al ex jefe de la Policía Nacional, Jaime Marte Martínez, para cuestionarlo en relación a una presunta sobrevaluación que supera los 8 millones de pesos en la compra de cartuchos, bombas lacrimógenas y chalecos antibala.

Sin embargo, el oficial rehusó someterse al interrogatorio bajo el alegato de que las autoridades no habían notificado el contenido de la acusación.

Dijo que asistió ante un llamado del DPCA, pero sus abogados comprobaron que no procedía someterse al interrogatorio.

A su salida de las oficinas del DPCA, Marte Martínez denunció que en los últimos tres años han estado asediandolo y molestandolo, aunque no dijo a quien o quienes se refería.

En los últimos tres años me están vigilando constantemente, me cortan la luz de mi residencia y me instalaron unas torres con cables de alta tensión del tendidos eléctricos por una propiedad que poseo en el kilómetro 22 de la autopista Duarte de manera abusiva, expreso.

Dijo que hasta el momento desconoce cuantas acusaciones se van a inventar en su contra, porque les hicieron auditoria a todos los departamentos de la Policía Nacional y todavía buscan elementos.

Además, agrego, a gran parte de los oficiales que me acompañan les han hecho lo mismo y lo están vigilando las 24 horas para conocer a cuales actividades se dedican y con quienes se reúnen, violando la ley de libre tránsito y de expresión.

Dijo que si tienen contra él una campaña después de la denuncia del spot donde el presidente Leonel Fernández salía con un oficial de las Fuerzas Armadas lo están haciendo muy mal porque en el país existe un estado de derecho, donde se pueden hacer denuncias siempre y cuando no vayan en contra de la Constitución.