Los propulsores del proyecto tomaron en cuenta las riqueza cultural y natural del país, por lo que trabajan con el Gobierno para ofrecer lo mejor a miles de turistas que atraerá el proyecto a Santo Domingo desde este año.
POR SOILA PANIAGUA
Con una inversión que superará los US$700 millones, Inversiones Turísticas Sans Soucí trabaja en el desarrollo del proyecto de Rehabilitación y Ampliación de Puerto Santo Domingo, que abarca cuatro fases, entre éstas la remodelación de dos terminales.
También la construcción de dos hoteles, una marina deportiva, un proyecto habitacional y un centro comercial, lo que generará miles de empleos y aumentará la oferta complementaria del turismo en República Dominicana.
Luis Molina, director ejecutivo de Sans Soucí Holding y Jorge Estévez, director corporativo de relaciones públicas e institucionales de Inversiones Turísticas Sans Soucí, dos de las empresas que invierten en el proyecto, explicaron que la obra que se inició en el 2005 y que espera esté lista en el 2010, abarca todo el frente de la ciudad de Santo Domingo y un área de unos 495 mil metros cuadrados.
Hasta el momento los principales inversionistas de la obra son empresarios dominicanos, aunque varias empresas internacionales han mostrado interés en el proyecto por su magnitud y capacidad de recuperación de la inversión.
Los inversionistas también trabajan en un proyecto que abarca apoyo a la educación, los deportes y la cultura, principalmente para personas que viven en la parte oriental que serán los más beneficiados con miles de empleos que generará la obra en un corto, mediano y largo plazo.
La obra también incluye la construcción de un parqueo con capacidad para el estacionamiento de unos 600 vehículos, área de recreación y tiendas de zona franca.
Unos de los dos hoteles que se construirán tendrán unos 300 habitaciones y el otro 60, ambos de cinco estrellas, preparados para recibir a los miles de turistas que vendrán al país en cruceros, mientras que el proyecto habitacional incluye unas 5,000 viviendas.
El proyecto que se inició en el 2005 con la renovación del puerto Santo Domingo como parte del proyecto de redesarrollo que busca integrar el área del puerto con la Ciudad Colonial y se calcula que terminará en el 2010 un complejo habitacional.
El objetivo es convertir la capital dominicana en un destino atractivo para cruceros, yates y turismo de clase alta.
Hasta el momento se han invertido alrededor de US$21 millones de dólares y se estima que para final de año serán unos US$43 millones, sobre todo en la terminal de Sans Soucí, el cual será un homeport, o puerto madre, de última generación, con capacidad para manejar unos 3,800 pasajeros más la tripulación. La obra incluye la rehabilitación de las dos terminales, el reacondicionamiento de la Don Diego, que se inició en el 2006, la construcción de la Sans Soucí que se espera termine a finales de este año, trabajo de drenaje en gran escala en el canal de acercamiento y área de retorno.
Ese es el único proyecto de concesión que cuenta con el apoyo del IFC de Estados Unidos.
El proyecto residencial tendría alrededor de cinco mil apartamentos, según informó Luis Molina.
La terminal Don Diego tiene dos áreas de recepción de cruceros, una en el ala orte y otra en la sur. Marina deportiva es de clase mundial, según sus promotores. Estará preparada para el manejo de yates de hasta 42 metros de eslora. En el proyecto se desarrollará un club para ofrecer servicios adicionales.