MILÁN. Las autoridades de la ciudad italiana de Turín se negaron a registrar al bebé de una concejal, concebido por inseminación artificial, porque la ley italiana contempla los tratamientos de fertilidad solo para parejas heterosexuales, dijo la madre.
En una publicación en Facebook, Chiara Foglietta explicó que ella y su pareja, Micaela Ghisleni, intentaron registrar a su hijo, Niccolo Pietro, tras su nacimiento el pasado viernes. Según contó, la respuesta de las autoridades fue que “debe declarar que tuvo una unión (relaciones sexuales) con un hombre para registrar su hijo. No hay forma de decir que lo tuvo por inseminación artificial”.
“Todos los niños tienen derecho a conocer su propia historia”, dijo Foglietta, que se negó a aceptar la propuesta de las autoridades, en Facebook.
El vacío legal se debe a un decreto ministerial de 2002 que no contempla que una mujer, en lugar de una pareja heterosexual, pueda concebir un hijo a través de la inseminación artificial, explicó.