Luis Reyes, obispo de la Asociación de Iglesias Jesucristo Fuente de Amor instó a los dominicanos acercarse a Dios para que la nación pueda ser transformada de mal para bien y transite por senderos de justicia y de paz.

«Si realmente queremos un cambio en el país debemos volvernos a Dios a través de Jesucristo, y caminar conforme a los mandamientos y las enseñanzas que nos dejó en Su Palabra», dijo.

Asimismo, hizo un fuerte llamado al Poder Judicial a aplicar todo el peso de la ley a quienes se compruebe que desfalcaron el erario con sumas millonarias y que han sido acusados en distintos expedientes.

«La República Dominicana es una sola, la nación es de todos y debemos luchar por ella, no es posible que unos pocos se queden con las riquezas del país», afirmó.

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Recordó que desde hace más de 25 años los gobiernos que han tenido los dominicanos han destacado el crecimiento económico que ha tenido el país, sin embargo, esto no ha llegado a las grandes mayorías y sectores necesitados, sino que se ha quedado en un grupo privilegiado.

Al encabezar un retiro en la Iglesia Jesucristo Fuente de Amor Central del ensanche Quisqueya, en el Distrito Nacional, el pastor Reyes abogó por medidas inmediatas de protección a la mujer, que pongan fin a tantos abusos y feminicidios.

Reclamó también que, en esta nación fundada por Juan Pablo Duarte con principios y valores cristianos, permanezca la prohibición al aborto y a los matrimonios entre parejas del mismo sexo.

«Estamos orando en este retiro por la República Dominicana, por programas a favor de las madres solteras, que haya menos embarazos de adolescentes, ya que, de cada 10 parturientas, 7 son menores de edad», señaló.

Exhortó también a la población a prestar atención a los consejos del Centro de Operaciones de Emergencias (COE) y a tomar medidas preventivas, sobre todo con los niños y niñas, así como al viajar por las carreteras, para que finalicemos la Semana Santa con el menor número de tragedias.

Como invitados especiales acompañaron al obispo Reyes, los evangelistas internacionales Ramón Mena y Héctor Díaz, así como los profetas Leonardo Flores (mexicano) y la dominicana Yesenia Reynoso