BARAHONA. A pesar de contar con grandes edificaciones y mansiones costosas, las calles de las urbanizaciones Blanquizales y Los Maestros, de esta ciudad, se han convertido en caminos vecinales abandonados.
Se trata de dos de los residenciales más atractivos y con viviendas más lujosas, pero sus constructores se olvidaron de construir las calles, y con las lluvias y el paso de vehículos se han tornado intransitables.
Comerciantes e industriales, así como profesionales de diversas áreas, entre otros, se han establecido en costosas viviendas valoradas en varios millones de pesos, inundadas por la inmensa polvareda que levantan los vehículos a su paso por estas vías.
A estas hermosos residenciales les hacen falta sus calles, y a pesar de que aquí vivimos personas importantes, el Gobierno no se ha condolido de nosotros para hacernos las calles y dejar de pasar estas vicisitudes que pasamos, expresó Pedro Luis Medina Díaz.
Indicó que el Gobierno debe tomar en cuenta a estas dos urbanizaciones en su programa de asfaltado que emprenderá en todo el país.
Expresó que el ayuntamiento puede construir las aceras y los contenes, mientras que el Gobierno, a través de la Oficina de Ingenieros Supervisores de Obras del Estado, puede pavimentarlas.
Medina Díaz dijo que tienen la esperanza de que el Gobierno disponga estos trabajos en enero.
Las claves
1. Se olvidaron
Los constructores de los residenciales Blanquizales y Los Maestros se olividaron de construir las calles, las cuales se han convertido en caminos vecinales generadores de una gran polvareda y lodo, cuando llueve.
2. Los residentes
Los residentes en estas dos urbanizaciones piden al Gobierno disponer la construcción de las calles enero próximo, a fin de dejar de pasar las visicitudes por las que están atravesando.