La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) y la Fundación Institucionalidad y Justicia (Finjus) deploraron la grave situación de la cárcel preventiva de La Romana, condiciones que entienden son totalmente incompatibles con los derechos de la persona.
Manuel Mercedes, presidente de la CNDH dice es inaceptable que reclusos con prisión preventiva, en vez de ser enviados al centro modelo, sean mantenidos en una cárcel donde no deberían estar más de seis horas, y lo mantengan por meses.
Para Servio Tulio Castaños Guzmán, vicepresidente ejecutivo de la Finjus, las malas condiciones en que está esa cárcel, que pertenece al viejo modelo, evidentemente representa un acto de crueldad.
“El hecho de que usted le haya fallado a la sociedad, eso no le da derecho al Estado de tener en esas condiciones a esas personas”, ponderó el jurista, quien expresa que muchas de las cárceles del viejo modelo, parecen campos de concentración.
“Imagínate tú, si desde la propia Justicia se da este tipo de situaciones, evidentemente que estamos frente a hechos graves”, afirmó Castaños.
Entiende es una consecuencia de la falta de recursos que se le asigna al Poder Judicial y al Ministerio Público, que lo lleva a tener reos donde el hacinamiento es lo que impera.
A su juicio, estos centros del viejo modelo no contribuyen a la reinserción del individuo y para la muestra está que el porcentaje de reincidencia del nuevo modelo es de un 7%, y del viejo sistema es de 50%.
Recomendaron que se asigne un mayor presupuesto al Ministerio Público para que todas las cárceles pasen al nuevo modelo.