El presidente de la Central Nacional de Transportistas Unificados (CNTU),  Ramón Pérez Figuereo, denunció ayer  que el Gobierno ha iniciado  una serie de “artimañas” para desactivar el paro nacional de labores convocado para hoy, a partir de las  6:00 de la mañana, incluyendo la distribución a los choferes de  RD$2,000 y seis galones de combustible a cambio de que no paralicen sus unidades.

“Queremos denunciar también que se está utilizando a la Policía Nacional para amedrentar a los dirigentes de las organizaciones populares que organizan  este paro, montándole vigilia en sus casas y oficinas como una manera de intimidarlos”, precisó el sindicalista.

En rueda de prensa, el dirigente de la Coordinación Nacional de Organizaciones Populares, Sindicales, Choferiles y Profesionales reveló, además,  que a los denominados “rompehuelga” se les han entregado armas de fuego, entre ellas ametralladoras, así como dinero en efectivo, para neutralizar la convocatoria.

No obstante, Pérez Figuereo vaticinó el éxito de la huelga pacífica y dijo que la población no resiste más la indiferencia de las autoridades gubernamentales ante los problemas sociales del país.

Motivos

Los organizadores del paro nacional reclaman del Gobierno un verdadero plan integral contra la delincuencia, modificación a la Ley de Hidrocarburos, rebaja del precio de los combustibles y la tarifa eléctrica, anulación del contrato con la Barrick  Gold y disminución de los precios de la comida  y medicamentos. También, que se atiendan las demandas del sector productivo  y que se cumpla con el 4% del PIB para educación y el 5% para la UASD.