El salmón pasa mucho tiempo de su vida en los dos ambientes. Su cuerpo alargado, que llega a medir más de un metro,  tiene el lomo oscuro y los flancos plateados. No todos los salmones tienen la misma calidad. El de primavera es más fino, caro y delicado que el de verano, y el salmón del Atlántico es más codiciado que el del Pacífico. El salmón de mayor calidad y precio es el “ahumado” –salado y macerado por la combustión de maderas nobles- que procede de Escocia, Irlanda, Islandia y Noruega.

Este pescado es muy nutritivo: cada 100 gramos aportan 200 calorías, 22 gramos de proteínas y 12 gramos de grasas. En cuanto a vitaminas se refiere, el salmón contiene vitamina D, sobre todo en su hígado,  además de B1, B6 y vitamina A en cantidades apreciables.

 La principal cualidad del salmón es la gran cantidad de proteínas que contiene y el elevado valor biológico de éstas.

Consejos

Plancha.  Para evitar que el pescado a la plancha se queme antes que se cueza o si simplemente no tiene una plancha, tiene dos soluciones. Si no tiene  plancha, ábrale algunas ranuras al pescado por un lado y por el otro. Le quedará blanco y bien hecho por dentro. Si no tiene plancha, colóquelo en una bandeja, crudo, y métalo en el horno bien caliente. Cuando esté dorado por encima voltéelo y una vez dorado, baje la temperatura del horno hasta que esté hecho.

Miel siempre a punto.  Para que la miel no se endurezca, introduzca en el frasco un trozo de zanahoria bien limpia y seca, con toda su piel.

Pan.  Para que el pan no se ponga duro, introduzca una rama de apio en la panera.

Recetas

Fiesta de salmón:

4 trozos de filete de salmón fresco con piel

3 cucharadas de aceite de oliva

Sal a gusto

Pimienta a gusto

Preparación.  Calentar el aceite a fuego alto en un sartén. Añadir los trozos de filete de salmón (con la piel en el fondo de la sartén). Cocinar sin darle la vuelta durante 10 minutos aproximadamente hasta que se forme una costra por la parte de abajo y la parte de arriba esté cocida. Remover la costra que se ha formado durante la cocción y servir acompañado de arroz o vegetales y decorado con rodajas de limón amarillo. Esta    receta es una opción a preparar en estos días de Cuaresma, que pese a que el pueblo dominicano tiene recetas establecidas puede servir para sorprender a los miembros de la familia. Además, ésta es  una receta fácil de preparar y muy nutritiva.

Ensalada de salmón:

1 lechuga

1 manzana grande

 1 tomate maduro sin semilla

50 grs. de salmón ahumado cortado a tiras pequeñas y con algunos trozos más grandes de adorno por encima

Aceite, limón, sal y pimienta, al gusto

Preparación.  El primer paso es cortar muy fina la lechuga: cada hoja por la mitad y después en láminas finas. Luego debe cortar  la manzana en dados pequeños, el tomate en trozos muy pequeños y  el salmón en tiras pequeñas del tamaño de la lechuga.

   Mezcle la base suavemente de forma que queden enteros los ingredientes. A continuación, ponga encima de la ensalada para adornar unos trozos de salmón más grandes, finalmente añada limón, aceite, sal y pimienta.

Qué tomar

Coconut Cooler:

2 taza leche de coco

Jugo de dos limones

1 ramita de menta fresca

Hielo

Preparación.  Primeramente, vierta la leche de coco, el hielo y el jugo de los limones en  la coctelera y agite bien. Eche en una copa y agregue la soda, decore con la ramita de mente. Esta es una bebida tropical y por tanto  muy refrescante. Sin duda, una  fácil  receta para sorprender a cualquier invitado.

Qué hacer a la hora de  manipular  el  salmón  y alimentos parecidos

Si desea  mantenerlo durante más tiempo, póngalo en el congelador que lo conserva perfectamente durante dos meses. Las fórmulas más adecuadas para cocinarlo son la cocción en caldo  y el asado en horno o parrilla. En cuanto a las salsas, la elección recae en la mantequilla fundida y la mayonesa, para los salmones de primavera, y guarniciones robustas para salmones de verano, de sabor menos delicado.

Consejos muy prácticos para que  aprenda  a elegir  el mejor salmon

  El salmón se vende fresco, congelado, ahumado, salado y en conserva. El buen salmón fresco se presenta rígido, con la piel plateada, los ojos brillantes y las agallas de color rojo vivo.

 Cabe decir, a favor de la economía, que al ser la carne de salmón sustanciosa, las raciones a servir no tiene por qué ser grandes.