Muy buenas tenga usted, mi querido Magino. Tengo para decirle que no es que uno se oponga, por fastidiar a la construcción de la isla artificial de la que tanto se habla y poco o nada se sabe. Cuanto pasa es que en este dichoso país muchísimas pendejuanas que tienen que ser de interés nacional se rodean de misterio. Se ha hablado de que la isla conllevará una inversión de 450 millones de dólares, que hará el sector privado, se supone que nacional y extranjero.

 Que el Estado no tendrá que invertir un solo centavo y muchísimas pendejadas más. Se firmó un contrato para la construcción entre el Estado y los patrocinadores privados. El contrato, sus términos, se desconocen, y ahora un alto funcionario afirma que el mismo no será divulgado hasta tanto sea enviado al Congreso Nacional. Vale esperar que el Congreso, cuando lo reciba, lo hará publicar y lo discutirá en vistas públicas para que se conozcan todos los pro y los contra del mismo. ¡Claro que cualquiera apoya cosas que puedan beneficiar al turismo, si no son dañinas, máxime en una época en que la economía de servicios va dejando esa actividad como la verdaderamente más productiva! Sobre todo, viejo verde, después que China barrerá con la producción de textiles y otras pendejadas, aprovechando el bajo salario que paga a su gente. Pero eso no quiere decir que todo sea misterios. También se habla del proyecto de Marina del actual muelle a Sans Soucí. Se expresa que dispondrá de tres atracaderos, lo que nos alegra, y ojalá no disponga de ningún atracador, aun cuando eso es mucho aspirar. Lo importante, Magino del alma querida, es que se le digan las cosas a los gobernados, que se deje la soberbia de lado, que se mande la arrogancia a casa del carajo… El estimado amigo monseñor Agripino Núñez Collado lamentó que pese al avance de las comunicaciones, tanta gente, en el país, no pueda acceder a Internet. Se comprende la preocupación del religioso y mediador por excelencia de cualquier crisis que se presente aquí. Pero, monseñor, ¿cómo esperar acceso a Internet de tanta gente que no lo tiene a los empleos, a la salud, a la educación y que padece de una desnutrición crónica? Que venga Internet, pero no se olvide que comer es primero, y no comer como consigna política, sino llenar bien el estomaguito con una dieta bien balanceada…  ¿Será verdad, Maginito, el rumor que circulaba ayer, de que un funcionario medio de una oficina pública había sido detenido y relacionado con el ya famoso caso Quirino, que no hay necesidad de señalar de qué se trata?… Cuba resultó mucho para el equipo dominicano de volibol femenino, que ganó plata en la justa que concluyó anoche. Congratulaciones a las muchachas de ambos países. Por cierto Magino, ¡los timbales que se tienen aquí para irrespetar al espectador, sea en estadios o por la pantalla chica no están descritos! Anteanoche, cuando Dominicana ganaba a Estados Unidos, se colocó la transmisión del partido en un cuadrito de la pantalla, nada menos que en el canal del Estado, el que pagan los contribuyentes con sus impuestos reventadores. ¿La razón? Ni modo, había que presentar un espectáculo de Estado, la transmisión del sorteo de la oficial Lotería Nacional, fomentadora de juegos de azar, la antítesis de cualquier movimiento deportivo. Lo tremendo del caso es que sigue el irrespeto a los no videntes en esos sorteos, como en la administración anterior, pues se vendan los ojos a los ciegos que sacan los bolos de los globos explotadores de la esperanza. Carajo, si no ven, ¿por qué vendarlos? ¡Vaya usted a saber!… Congratulaciones, Maginito, al doctor Euclides Gutiérrez Féliz, por haber auspiciado la reconstrucción del club deportivo y social de la Superintendencia de Bancos.  Allí resplandecen, de nuevo, las instalaciones deportivas y las áreas verdes. El morenito no habrá jugado ni bingo en su juventud, pero de que es un funcionario rector y entusiasta, ni modo…  ¿Que el país pierde ocho millones de dólares mensuales con las operaciones energéticas de Smith and Enron y Cogentrix? ¿Y qué? Parece que eso gusta a mucha gente, pues que se sepa, jamás han sido detenidos, ni para interrogatorios, algunos de los lerenes que negociaron los contratos con esos extranjeros que vinieron a “ayudarnos” en nuestros problemas energéticos. Es más, Cogentrix fue avalada por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), con anuncios de película por agencias internacionales. ¡Cojan ahora y no fuñan!