Mi querido Magino, hace unos días conversaba con un viejo amigo en relación a la disposición legal que autoriza o autorizaría la donación de órganos humanos para trasplantes. Le decía a ese amigo, más bien en son de broma, que tenía mis reservas en cuanto a la efectividad de esa disposición pues hay personas que cuando guindan los tenis lo mejor es enviarlas enseguida al panteón de los Carmelitas. Me cuentan que un señor que se considera “bien enterado” pero que no es más que un buen deslenguado, “denunció”, a través de la televisión, que el periódico HOY, por presiones gubernamentales, había decidido excluir de sus páginas los artículos suscritos por los economistas Arturo Martínez Moya y José Lois Malkum. La ‘denuncia’ daba cuenta de que las presiones del gobierno se hicieron frente al propietario de HOY, señor José Luis Corripio Estrada (Pepín) y que éste había dispuesto que no se publicaran más artículos firmados por Martínez Moya y Malkum. Eso, desde luego, es no conocer a Pepín Corripio. Esa “denuncia” mi querido Magino, no es más que una vulgar mentira…  En primer término, Martínez Moya, un dirigente del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), es un columnista muy apreciado por HOY. Sus trabajos aparecen en la edición del lunes, en la sección Económicas. La pasada semana, según comunicó el editor económico Mario Méndez, hubo problemas técnicos en la recepción del trabajo del señor Martínez Moya y a éste se enteró del asunto. Méndez expresó ayer que Martínez Moya había prometido enviar su columna en el fin de semana, para que aparezca, como de costumbre, el día lunes…  Don José Lois Malkum, antiguo secretario de Finanzas y gobernador del Banco Central, es otro economista que goza del aprecio profesional y personal de HOY. Recientemente nos honró al escogernos, para que publicáramos una columna de su autoría, lo que hacemos con sumo placer. La pasada semana se publicó una columna suya y ayer se recibió una nueva, remitida por el canal que siempre usa, el del director ejecutivo Bienvenido Alvarez Vega, quien la remite, de inmediato, al despacho del director. Malkum puede decir si a sus trabajos se le han hecho cambios, ni siquiera de una coma…r Es muy posible, mi querido Magino, que por aquí no tengamos los pantalones que denunciantes proclaman que tienen. Pero de algo estamos seguros: ningún guanajo nos va a dirigir, nos va a sacar del trabajo que realizamos, ni nos va a dar cuerda para lograr sus propósitos. HOY siempre ha contado con su línea y, muy felizmente, no ha tenido necesidad de cambiar de casaca, jugando cuatro años en la Liga Americana y pasando después a la Nacional. Sólo jugamos en un equipo ¡el de los lectores que nos favorecen…  Que sepamos, ningún gobierno nos ha presionado, ni siquiera el del doctor Joaquín Balaguer, al que tantos alfileres le prenden, pero al que tanto admiran algunos fascistas con visos de demócratas. Las administraciones perredeístas y peledeístas no se han metido con nosotros, no nos han presionado ni nos han dado órdenes. Y cuando a algún gobierno se le ocurra hacerlo, pues mandarlo al carajo no es tan difícil, por menos pantalones que se tengan. Desde luego, Magino, eso de los pantalones es algo tan relativo; algunos se usan tan ajustados que parecen puestos con calzador…  Por aquí tratamos de ser respetuosos, viejo vagabundón, y de no meternos con las líneas editoriales de los demás medios. Si algunos de esos medios cree lo contrario, pues también los respetamos. Eso sí, viejo verde y rascabuchador, hacemos las cosas de acuerdo a nuestra conciencia, no porque algún pendejo crea que pueda intimidarnos para que cambiemos de línea. Eso queda claro. Como claro queda que pobre del infeliz al que le trasplanten la lengua del denunciante de que hablamos.