Coctelera

<p>Coctelera</p>

  El viejo y querido amigo doctor Euclides Gutiérrez Félix es lo que se llama un diablazo a caballo. Mire, Maginito, sin duda alguna, Euclides es uno de los peledeístas que más cerca estuvo del líder del partido, el fenecido profesor Juan Bosch. Hace unos cuantos días, el aspirante peledeísta a la nominación presidencial, Danilo Medina, dijo en público que Bosch había sido anti-reeleccionista. Periodistas quisieron conocer la opinión de Euclides sobre el particular, pero el morenito expresó que ignoraba ese detalle en la vida de su líder.

El Coctelero le cree a Euclides, pues éste se encontraba muy chiquitito en 1963, cuando el profesor auspició la Carta Magna más progresista que hemos tenido, Carta Magna que proscribía la reelección presidencial. Y ya que hemos mencionado a Danilo Medina, éste, en uno de sus recorridos proselitista, prometió, si llega a convertirse en presidente del país, la creación del «Banco de los Pobres», para que la gente de muy escasos recursos económicos pudiera accesar a los créditos. Sería muy conveniente que se explicara cómo se formaría ese banco y de dónde provendrían los recursos para capitalizarlo… Es loable que el síndico Juan de los Santos, de Santo Domingo Este, vaya en auxilio del Acuario Nacional. Dicen que la rehabilitación de esa importante y atractiva obra requiere unos veinte millones de los podridos. Bien, Magino, lo que no se detalla es cómo se llegó al actual punto de deterioro, en ese acuario, que hoy se necesite un importante suma de dinero para repararlo. Se tiene entendido que el Acuario Nacional siempre ha contado con muy buena demanda, de escolares, profesionales, turistas. Y por eso se pregunta si el mantenimiento era nulo o muy secundario. Se puede estar en la más completa seguridad, mi querido Magino, de que si el mantenimiento hubiera sido constante, hoy a Juancito no se le presentaría un cuadro como el que debe estar observando. Pero no lo dude, viejo descuidado, la falta de mantenimiento es un estado cultural a nivel del Estado… Entonces tenemos caro amigo, que los agentes de AMET serán dotados de un spry que contiene gas pimienta y que deberá ser usado contra los choferes que se rebelen ante los muchachones del general Fernández Fadul. Desde luego, vale preguntar qué clase de gas se podría usar contra los ametianos que solo conocen la violencia y el abuso. ¿El gas morado? El color es pura coincidencia… Otra cosa, Maginito, el secretario Franklin Almeyda Rancier se encargó de comunicar al país lo que era muy lógico esperar: los «pitillos» que usarán los alcoholímetros serán desechables. De todos modos, es recomendable pedir a la ciudadanía que cuando tenga que someterse a una prueba, se le exija a los ametianos que abran el envase de los pitillos en presencia de los interesados. ¡Por si acaso, para así neutralizar el poder creativo de alguna gente!… La señora Cristina Malmberg es representante del Banco Mundial. La buena señora acaba de descubrir el helado en palito: quienes usan energía eléctrica, tienen que pagarla. Pero la señora Malmberg dice una gran verdad: primero hay que perseguir a los grandes ladronazos de energía eléctrica y no hacerlo con los chiquitos. Desde luego, grandes y chiquitos tienen que pagar la energía que consumen. De lo contrario, y aquí también hay que darle razón a la señora, ningún sistema energético puede funcionar bien, muchos menos uno como el criollo en que el cincuenta por ciento de la energía que se sirve no se cobra. Sería buenos al mismo tiempecito, que la señora Malmberg indagara lo de los precios a que se vende el kilovatio en el país y si es lógico que se tenga que pagar a proveedores de energía por la capacidad instalada y no por la servida. ¿Estamos?

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