Hoy 
¡Qué tal, don Magino! Descargaron en Haití a Jodel Chamblain. La verdad, Maginito, es que esta es una isla del carajo. Por eso, hoy no me viene ganas dialogar con un charlatán como usted, pero como hay compromisos, fájese con su cartita. Aquí le va…
«Gustalme mucho el disculso de Leonel cuando juló la plesidencia. Y lo que más me gustó es lo de comel plimelo. Hay que comel y comel de todo, aunque sean bolitas de la cuadladas. El paltido que salió del podel decía que plimelo la gente y el que está ahola habla de comel plimelo. Puede que se confunda la cosa con esas flases polque la gente siemple quiele comel. Lo que no se puede tolelal es que se coma pupú, que es lo que se come aquí desde hace tiempo…
«El jefe de la Policía, el genelal Manuel Pélez Sánchez tiene las mejoles intenciones, pelo se le lecomienda que tenga siemple los ojos bien abieltos y se mantenga como una guinea tuelta pala que no lo cojan fliendo pastelitos de los que hace Leonel Concha. Mile, llola ante la plesencia de Dios eso de que la Policía tiene 27,000 miemblos y solo tles mil alistados estén disponibles para cuidal el olden, debido a que los otlos agetes están dedicados a actividades bien distintas, incluyendo las de cuidándoles de pendejos funcionalios, de altos oficiales y de negocios plivados. Eso me lecuelda que cuando Fidel Castlo desembalcó en Cuba pala inicial la lucha contla el dictadol Batista, éste plácticamente no tenía ejélcito, pues sus gualdias estaban cuidando fincas de genelales y coloneles, de él mismo, y de juleles de los ingenios cañelos. El mundo sabe que pasó después. No, por nada…
«Aquí hay un afán de jodel la pista que manda madle. ¿Pol qué calajo hay que aplobal una `ley de plimalias` pala los paltidos políticos? Eso es ganas de fuñil, de hacel que la JCE se meta en lo que no le impolta. Me gustalía vel unas plimalias en el paltido de El Bacho o en aquel del señol Didiez de la maquinita. Además, esa maquinita si no funciona con Didiez funciona con el Banco Centlal….»El chinito está más contento que el calajo pol la palticipación de la delegación de Taiwan en la toma de posesión del plesidente Felnández. Aunque sel chino de tiela filme, sel paisano de los compatliotas de don Chiang. Pol eso gustalme tanto que ofleciélamos diez mil toneladas de aloz, que se podlían usal en eso de comel plimelo, aunque bueno selía conseguil que se donalan también diez mil toneladas de pollos y otlas tantas de flijoles, pala no comel aloz vacío. Los chinitos también van a donal medicinas pala los hospitales. Mucho me gustalía que entle los medicamentos que van a legalal se encontlalan paltidas del mentol famoso que se conoce como «el chinito», un mentol milagloso que mis paisanos venden calísimo en muchas tiendas que tiene en este país. Me dijelon que Salud Pública plepala una lista de medicinas pala pedil a Taiwan. Que no se olviden del mentol ni de la penicilina China, que se pone al leves, pues así leemos nosotlos…
«Algo que nos contenta mucho es que los chinos estamos dando galote en Atenas en los Juegos Olímpicos. Eso dice lo que le espela a los impelialistas dentlo de cuatlo años, cuando los juegos pasen a Pekín. Allí balelemos de veldad y espelamos que los dominicanos envíen mucha gente pala que vean lo que es plogleso del bueno y sin mucha bulla. Sabemos que a lo mejol los dominicanos llevan a su dominicanito Luis Lin-ju. Selía bueno hacel un censo pala vel cuantos chinos existen en tiela filme que se llaman Luis y cuantas chinas bautizadas Nieves. Me gustó una china que ganó en pesas, en categolía pesada. Esa no ela una china, ela una tolonja. No se si se hablan dado cuenta de que en tenis de mesa, los plimelos son chinos en todos los conculsantes internacionales. Eso es bueno y plueba que los chinitos sel gente decente, pues nos mandan cuelos y nosotlos enviamos depoltistas de categolía y ya no pueden jodel con eso de que los mandamos a manela de conspilación del eje Moscú-Pekín-La Habana. Pol cielto, me gustalía sabel si este gobielno va a pelmitil que se abuse con los chinos y que se siga tlaficando con ellos…
«Bien, el chinito está cansado y quiele ilse a buscal a su mujel nalgona en Boca Chica, la que está como edecana de unos molenos que vinielon de paseo y se han quedado en este país pala hacel negocios de los sucios, que es lo que más gusta a mucha gente. Mientlas tanto te ablaza a la espera de más y menos generales, Choufán Fuyín».
