Coctelera

<P>Coctelera</P>

”Monseñor  Antonio Camilo, obispo de La Vega, dice que uno no anda enseñando el ombligo, porque eso bastante feo que es. Con el perdón, monseñor, y dicho sea con todo respeto, primero hay que ver el ombligo bonísimo que se gasta Shakira”. Farmacia Mella…

Magino querido,  usted nada más piensa en elecciones. Su candidato puede ganar o puede perder y se acabó. Pero me extraña que usted no se mortifique por algo que es inevitable que llegue: las repercusiones locales de la crisis económica que abate a Estados Unidos.

 Esas repercusiones a lo mejor tardan unos meses en establecerse y choca que usted, irresponsablemente, no haya comenzado a tomar medidas efectivas antes de que le sacudan el pichirrí…

La crisis  financiera norteamericana no es pajita de coco. Nada menos que un Nobel de Economía, Joseph Stiglitz, afirma que esa crisis es la peor que atraviesa el mundo desde la “gran depresión” de los años 30 del pasado siglo. El dólar ha recibido toda clase de golpes del fortalecido euro y parece que el yen japonés también le toma su cariñito.

 El alza en los precios del petróleo luce indetenible y la gasolina tiene sitios en Nueva York que se vende por encima de los cuatro dólares el galón. La Reserva Federal ha tenido que intervenir para paliar situaciones muy difíciles.

 El poderoso City Group despidió 3,000 empleados, y General Motors, que acumuló pérdidas el año pasado por 38,700 millones de dólares, ‘incentiva’ trabajadores para que antes del primero de julio, un total de 74,000, estén fuera de la empresa.

 Delta, que no ha podido fusionarse con Northwest, despedirá 30,000 de sus empleados. Y ese es el comienzo en un país que ya ha gastado más de 600,000 millones de dólares en la guerra de Irak. Y usted, mientras tanto, mi querido Magino, comiendo bolas….

Si esa crisis  persiste y cunde el desempleo, ¿recibirá en el 2007? Los dominicanos residentes en Estados Unidos aguantarán sus tablazos. El turismo norteamericano, que se revitalizaba, tendrá que sufrir los efectos de la crisis. Pero parece que a usted nada de eso le afecta.

 Sigue consumiendo combustibles como un desgraciado y se me ha vuelto medio loco otorgando subsidios a diestra y siniestra. Solo en los dos primeros meses de este año, los subsidios al GLP y a los productores de energía triplicaron su monto con respecto al mismo período del 2007. La mitad de los ingresos tienen que destinarse a pagos de la deuda externa y a usted no se le puede perdonar parte de esa deuda, pues usted dice que está más bien que el carajo.

Dígame una cosita, ¿hasta cuándo se puede soportar el volumen de cargas fijas? Se lo repito, como le repito que mientras más se dilate en emplear el bisturí para exterminar lacras, más dolorosa será la operación cuando el Diablo llegue.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas