Coctelera

Coctelera

”El gobierno  entrega 43.8 millones a los lecheros. ¡Qué lecheros son los lecheros!”. Farmacia Mella…”El presidente  Bush envía al vicepresidente Cheney en misión de paz al Medio Oriente. ¡Se jodió la paz”. Farmacia Mella…

Querido Magino,  la marcha de ayer concluyó sin víctimas que lamentar. La marcha, originalmente, iba a ser de protesta del gremio médico que reclama un sustancial aumento salarial. Pero se convirtió en una especie de coctail con la participación de choferes de Fenatrano, del denominado Foro Alternativo, de la Asociación de Profesores y de grupos de estudiantes. En horas de la mañana, miles de personas se veían en las calles a la espera de transporte, en vista de que Fenatrano no permitió la salida de sus vehículos. La marcha tenía por meta el Palacio Nacional, donde los médicos tratarían de ver al presidente de la República. Podía presentirse de que no se lograría ni una cosa ni la otra, mientras las “organizaciones populares” pescarían en río revuelto…

Cuando  la marcha llegaba a la Avenida México, ocurrió lo que todo el mundo sabía que ocurriría, incluyendo a los rectores de la marcha. La policía evitó el paso con destino al Palacio y comenzó el tira y hala. La policía se valió de chorros de agua para dispersar a los manifestantes, quienes consideraron “un atropello” la actitud policial. El gremio médico reiteró que dirigirá ahora un paro por 72 horas a nivel nacional. Tendrá lugar el miércoles 26, el jueves 27 y el viernes 28, lo que permitiría un empalme con el sábado 29 y el domingo 30…

Mire, don Magino,  siempre le he dicho que los médicos al servicio de los hospitales del Estado están mal remunerados y que se exagera cuando se afirma que no trabajan. Lo que nunca he respaldado es el método de las huelgas, pues éstas a quienes verdaderamente dañan es a los pobres, a los que no pueden acudir a las clínicas privadas. Esta arma de las huelgas, más tarde o más temprano, se irá en contra de sus propulsores, pues los más necesitados comprenderán que con su salud no se juega. Vale reiterarle, amigo Magino, que el gobierno debe dar el frente a esta situación. Sentarse a negociar con los médicos no es ponerse de rodillas frente a éstos o cosa que se le parezca. De un diálogo franco, realista, podrá lograrse una solución satisfactoria, que vaya en beneficio de los dominicanos, salvo de aquellos que quieren turbar la paz pública. Y el oficialismo que no se alarme, que reclamos para que se aumenten los sueldos vendrán de todos lados. 

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