Coctelera

Coctelera

“¡Hay agua  en Marte! Pero, ¿habrá marcianos que, con latas en las manos, salgan a buscar el líquido como en un sitio conocido?”. Farmacia Mella…

En Saudi Arabia  le echaron el guante a un policía que tenía seis esposas. Como musulmán, le tocaban solo cuatro, pero parece que se le fueron las manos. ¿Las manos?

Querido Magino,  nos llevan otra vez a una corte internacional, acusados de violar un contrato. ¿Por qué será que siempre es el Estado el perjudicado con las acusaciones? Hemos tenido que defendernos en el extranjero acusados por General Electric, ICA de México, Hydro Quebec Soffatti y Smith and Enron entre otros. Ahora le toca el turno a una empresa que se identifica como CODACSA, a la cual se le entregó por concesión una carretera en el Este, cuya inversión sería cubierta con puestos de peaje otorgados por el Estado durante 30 años. Se tiene entendido que el contrato fue aprobado por el Congreso en el 2002, pues no se puede enajenar un bien del Estado sin la ratificación legislativa. ¿Se puede preguntar, quién o quiénes escribieron la opinión legal en relación al contrato? ¿Lo revisó el consultor jurídico del Poder Ejecutivo antes de que lo firmara el secretario de Obras Públicas?…

El secretario   de Obras Públicas, Víctor Díaz Rúa, le ha entrado a dos manos al contrato, que ha calificado de estafa. Díaz Rúa dijo que rescindirá el documento y que CODACSA no ha invertido un solo centavo, sino que se ha valido de más de mil millones de pesos recaudados en el peaje. Lo que sí es un hecho cierto es que el contrato fue otorgado de grado a grado y CODACSA, en la gestión original, tenía como socio a Dragados, de España, una firma de sólido prestigio y con capacidad para financiarse sin garantías. En el contrato original no figuraban garantías, era un instrumento puramente comercial. Grupos oficialistas salieron a construir la marginal, pero por falta de recursos u otra causa, entregaron la obra a CODACSA…

CODACSA  ya no tenía como socio a la española Dragados. Pero hay que ir más lejos. Se afirma que el contrato original, no el firmado en 2001, fue concertado cuando CODACSA ganó una licitación internacional, con la asistencia del Banco Mundial. CODACSA, en ese momento, tenía como accionista principal a Dragados de España y con la salida de éste, el proyecto dejó de ser sujeto de crédito. En relación con este asunto, hay otras cosuanitas que decir. Mañana, Dios mediante, le daremos su cosita. Mientras tanto,  carísimo Magino, pórtese bien, no pida dinero prestado, pues por eso después están dando brincos para cumplir con esos prestamistas que son verdaderos sacerdotes, pues su tasa de interés está muy por debajo de lo que suelen cobrar los bancos comerciales.

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