Buenas, viejo Magino. ¿Todo bien? Más le vale. Tengo un amigo que está dado al Diablo con los legisladores, pues entiende que en vez de estar pendejeando con esa vaina de «ley de lemas», deberían buscar la forma de arreglar el calendario para que el fin del año que acaba de iniciarse sea más ameno y gratificante. Entiende el tremendo vago ese que dado que las fiestas pascuales no pueden rodarse, sí se puede, en cambio, declarar el 24 de diciembre como día no laborable. Así tendríamos, en el 2004, que el viernes 24 sería festivo a tiempo completo, del sábado 25 nada le digo y el domingo 26, por ser domingo, nananina. Los legisladores, en una muestra perenne de gratitud hacia los gobernados, deberían declarar día de recogimiento y oración el lunes 27, día también no laborable y reponedor de energías. Eso daría un descanso, al mismo tiempo, a un Congreso Nacional formado en su totalidad por hombres de trabajo, preocupados hasta tal punto por el desarrollo nacional, que muchos de ellos forman sus propias organizaciones no gubernamentales, costeadas por los pendejos contribuyentes. La idea está lanzada. Descanso a fin de año en vez de lemas el 16 de mayo…..Don Nicolás quiere que dejen tranquila la Constitución. ¿Y cuándo ha podido vivir en paz ese instrumento? Siempre hay una partida de jureles hablando para su banda, que no creen que la Constitución sea, como dicen fuera de contexto que expresó el doctor Balaguer, sino un auténtico trapo. ¿Qué tendría de raro que trataran de modificarla para consagrar la ley de lemas? ¿O es que abriendo la reforma no tratarían los legisladores de llevar su mandato hasta el 2008 para entonces «unificar» las elecciones? Lo que sí no harían esos tiburones de la bahía es reducir su período a dos para que se haga una sola y general «escogitación» –como hubiera dicho el inolvidable don Carlos Goico Morales– el venidero 16 de mayo…..Maginito, hay veces que, involuntariamente, se desvirtúa la historia, pero después se copian los errores involuntarios y al cabo de los años la falla se consagra como verdad de a puño. Leemos que alguien escribió que la denominada «Bolita del Mundo» fue construida como homenaje a los héroes del 14 de Junio. Nada más falso. La «Bolita del Mundo» nace en 1955 cuando el dictador Rafael L. Trujillo hace construir la bautizada Feria de la Paz y Confraternidad del Mundo Libre», conmemorativa de sus 25 años de gobierno. Luego, erradicada la dictadura trujillista, el conjunto de instalaciones conocida como «La Feria», pasó a llamarse Centro de los Héroes de Constanza, Maimón y Estero Hondo y muy próximo a «La Bolita del Mundo» se erigió un monumento donde reposan restos de los héroes que, con las armas en las manos, protagonizaron las gestas del 14 y 19 de junio de 1959. A ese monumento hubo que ponerle vigilancia policial, dado que desaprensivos lo profanaban constantemente. Ahora se usan tropas para mantener la vigilancia de «La Bolita del Mundo» y poner fin a la cuerería que allí, por años, ha existido, como ha existido en la mayor parte del Centro. Dicho sea de paso, Maginito, no es la primera vez que se ha «limpiado» el Centro de prostitución, pero no se olvide usted que siempre ha pasado, con la protección de los propios vigilantes macuteros, que han vuelto las oscuras golondrinas a las que cantó el amigo Gustavo Adolfo…..El año debe comenzar suavecito, pero eso no quita que recuerde que Nonón hizo más bien que el carajo al largarse de la Junta Central Electoral (JCE). Los juegos que se lanzarán en esa liga no serán pendejaditas. Recuérdese, Maginito, lo que decía el Doctor y no me canso de repetirle: las elecciones se ganan y se pierden en la JCE. Aunque creo que eso, también, si es cierto tiene un límite…..Coctelera, Maginito, envía un cordial saludo al Padre Rogelio Cruz, donde quiera que se encuentre el polémico sacerdote barrial al cual su propia Iglesia le ha metido tremendo torpedo por jodón, según unos, por efectivo, según otros. La verdad es que necesitamos muchos Rogelio, como hubiera dicho en una época el amigo Tony Raful. ¡Qué vengan Rogelios, Rogelios por aquí, Rogelios por allá, Rogelios en grandes cantidades! Y mucho bien qué hace a la Iglesia de Dios un hombre como un cura humano hasta la tambora, que no anda predicando pendejadas, sino mostrando crudas realidades y combatiéndolas hasta donde puede. Hombres como Rogelio los necesitaría el Papa hasta en el propio Colegio de Cardenales.