¿Cómo está mi querido Magino? Supongo que muy bien si es por todas las cosas que me cuentan de usted. Quienes parece que están medio turulatos son los norteamericanos en Irak. ¡Y no es para menos! De todos modos, amigo del alma, uno lee que Colin Powell dice en Haití que la situación de ese país podría pasar al control de las Naciones Unidas y entonces cualquiera se pregunta por qué no se hace lo mismo en Irak. No, por nada…..

Maginito, y a lo calladito me dijeron que el Fenatrano de Hubieres picará 2.2 millones de pesos en la Junta Central Electoral (JCE), con el traslado del material que será usado en las elecciones del venidero 16 de mayo. Le sacaron la cabeza a la OMSA, pues cualquiera se imagina que disponiendo el vehículo gubernamental de tantos medios de transporte, no era necesario gastar dinero en el sector privado…

Por ahí se lee que el PLD responderá la campaña sucia del PRD, después de la Semana Santa, y no lo hará con flores. ¡Qué lástima que se gaste tanto en insultos y basuras! Vemos que monseñor Agripino Núñez Collado, un hombre siempre bien intencionado, pide un cambio de discurso electoral. Parece que el religioso y académico ignora que el discurso aquí es, en su mayoría, tan poco edificante, que usted lo cambia por pupú y se pierde el valor del empaque…

Me dijeron por ahí que el mayor general Rafael Guerrero Peralta, supervisor de control de precios o algo parecido, se reunió con distintos grupos que gravitan en la colocación del valor de las mercancías que se venden en el país, con miras a frenar la especulación. ¡Lástima que no haga lo mismo con los vendedores de energía, pues las facturaciones que reciben usuarios del servicio energético sí que rompen costillas. En cuanto a los otros precios, mi querido Magino, no me joda usted con eso de que guardias y policías lo controlarán. ¿Cómo carajo va usted a controlar el precio de una lata de guandules o de habichuelas, si ahora mismo le suben más de tres cocos pues el gobierno decidió cobrar el ITEBIS a ese tipo de productos alimenticios?…

Entonces tenemos, Maginito, un grupo de capitanes de navío, honorarios, en nuestra Marina de Guerra. Son hombres propietarios de embarcaciones deportivas, y que han cooperado siempre con la Marina de Guerra. Después de estos nombramientos, sería recomendable darle el rango de tenientes de piraguas a los organizadores de los viajes de dominicanos, en yolas, con destino a Puerto Rico. Muy oportuno que sería echarles el guante a todos esos delincuentes, colocarles las insignias del mencionado teniente de piragua y luego meterlos en celdas para que cubran todo el escalafón y dentro de unos treinta añitos se conviertan en almirantes…

¡Qué vivan las elecciones! Así gritaban ayer entusiasmados motoconchistas al enterarse de los avisos de concurso del Plan Renove, para renovar la flota del motoconcho nacional. ¡Filete para esos abnegados padres de familias –algunos tienen varias– que están llamados a resolver el problema del tránsito nacional! Leonel se reunió con representantes de esos motoconchistas hace algunas semanas y ahora el gobierno los premiará con motores. Total, los pendejos contribuyentes son los encargados de pagar las motos…

Me dijeron, Maginito, que se reanudaron los vuelos internacionales desde el aeropuerto de Herrera, en acatamiento a una sentencia de un juez en ese sentido. Otra banderilla que se coloca a los que quieren correr más que la bola para que se entreguen las tierras que conforman el citado aeropuerto. Y después del tollo que han hecho con el sitio escogido para construir el aeródromo de Guarícano, ni modo, a tocar campanitas y no de cristal de la alegría…

Magino, olvidaba decirle que hace algunos días el siempre controversial José Saramago, al dar a la luz pública su «Ensayo sobre la lucidez», estimó que la democracia debe ser sacudida de inmediato. Muchísima razón que tiene el Nobel portugués, pues tremenda porquería es la democracia tal y como la conocemos por estos lados. No ponemos en dudas que sea el mejor sistema de gobierno, pero mientras tanto nuestra monumental democracia es para servir a unos cuantos pendejos en perjuicio de millones de más pendejos de la cuenta. Bien, viejito charlatán, lo dejo, para que se prepare y esta noche acuda a la procesión del Nazareno y si por la iglesia de Nuestra Señora del Carmen ve a monseñor Rafaelito Bello Peguero, me le da un saludo cordial y un disco de Gardel.