Coctelera

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Muy buenos días, querido don Magino. ¿Se siente usted bien? No sea bobo, diga que sí. Y el 16 acuda temprano a su mesa de votación, deposite la papeleta marcando el candidato de su preferencia y si quiere, le ayudo desde aquí: cruce la casilla 23, y así estará favoreciendo al Bacho, a Raúl Pérez Peña, aun cuando en la citada casilla se nombre a Rafael Pérez Peña. Como en el béisbol, la boleta de la Junta Central Electoral (JCE) contiene ese errorcito, pero la pata se sacó a tiempo y por eso «el Bacho va». Y si no va, peor para usted, pues solo el Bacho bachea hasta los hoyos, hoyitos y boquetes que existen por aquí…..

Magino, muy en serio: debemos dar apoyo a la solución que se buscará a la situación que presenta la cañada de Guajimía, en Santo Domingo Oeste. Allí se invertirán 83 millones de dólares –logrados en préstamos con organizaciones canadienses–. El 15 por ciento del monto de las obras a realizar tendrá que ser aportado por el Estado a manera de contrapartida local. Julio Suero Marranzini, el director de la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo (CAASD) anunció la construcción de tres mil viviendas, en edificios multifamiliares, para alojar a las familias que residen en los alrededores de la cañada que desemboca en el Haina. Esa cañada es uno de los principales problemas de Santo Domingo Oeste y sin duda alguna que su solución constituye un notable avance en la lucha contra la pobreza del sector…

Citar a una audiencia judicial para el día de hoy, al jugador dominicano de béisbol Raúl Mondesí, es ganas de joder la paciencia. ¿Qué se pretende ahora? ¿Qué Mondesí abandone los Piratas de Pittsburgh? Que se le busque una solución a este caso es lo ideal, pero sin excesos. Naturalmente, que es muy chocante la celeridad de la justicia con casos muy escogidos con la existencia de once mil infelices presos preventivos que esperan juicios públicos, orales y contradictorios. Sin duda, Maginito, que es preferible darle por la cabeza a las sardinas, que fajarse con el tiburón…

¿Qué pasa con el procurador de Medio Ambiente de Monte Cristi? Además de que nadie le hace caso, ahora dizque la serruchan el palo para enviarlo al banco. ¡Ah rockash que hace cosas, mi querido Magino!…

¿Usted no quería, don Magino, saber de la vida de José Rafael Abinader? Pues bien, el economista dominicano acaba de proponer –según informa la prensa– que se unifiquen el dólar y el euro, que se cree el eurodólar. La moneda estaría regida por el Banco de Emisión y Regulación de la Moneda Internacional (Beremin). A lo mejor la idea camina. Ahora, lo que está medio fuñón es eso de emitir eurodólares en Santo Domingo. Hay que tener mucho cuidado no solo con los falsificadores nativos y extranjeros que sientan reales en esta tierra de nadie, sino también con Nelson Didiez y su maquinita para hacer cuartitos. Dado que Didiez, por haber comenzado muy tarde su campaña electoral, vaya pa’parte alguna el próximo 16, pero a lo mejor necesita darle trabajo a sus doce maquinitas impresoras, para evitar que se les dañen. También se puede correr el peligro de que eurodólares emitidos aquí suban la prima, pues recuerde usted que esa es la costumbre. Las cosas, cuando se fabrican en el extranjero y se traen para acá, en muchos pero muchos casos, cuestan más baratas y tienen mejor calidad. Por aquí, en cambio, hay que proteger a lerenes y con el lema de consuma lo que su país produce, tenemos que dar hasta el pichirrí…

Maginito, saque tiempo, y escuche desde esta mañana, a las 7, por Telesistema, Teleantillas y Coral 39, a los tres candidatos mayoritarios en sus exposiciones económicas: hoy Eduardo Estrella, mañana Hipólito Mejía y el viernes Leonel Fernández. ¡Goce!…..La mamá le pregunta al niño que desea ser cuando llegue a adulto. La criatura le responde: «contemplacinista del medio ambiente, para que los puertorriqueños me regalen rockash gratis y hacerme rico aunque joda a unos cuantos miles de compatriotas»…..

A lo mejor, Maginito, no estoy de acuerdo con el voto dominicano contra Cuba en Ginebra, en materia de derechos humanos. A lo mejor me hubiera abstenido. Pero cuando Hipólito Mejía ordenó votar como lo hizo el país en la ciudad suiza, ejerció un legítimo derecho en su condición de jefe de las relaciones exteriores del país. Que diga Fidel Castro cuanto quiera es asunto de Fidel. Pero que desde aquí, dominicanos, jodan la pista para tratar de enredar a su propio país es algo poco indicado por no decir otra cosa. Hipólito se va o se queda. Todo es cuestión de tiempo. La nación es permanente y no hay derecho alguno a dañarla.

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