Mi querido Magino, tenga usted muy buenas, aunque no sé que carajo de buenas desearle. Cualquiera no habla de los apagones, pero quien no lo hace, da la impresión de que no vive en este país o no es más que un carajo a la vela con más miedo que el que tenía Ciprián el Chinero a la lengua de Paco Escribano. Mire, viejo charlatán, he recibido una cartita muy curiosa y prefiero dejársela para irme por la libre en este sagrado día de Corpus. Lea su cartita y adelante con mucho valor…

«Tengo un año viviendo en este bello país y no sé por qué diablos no me decidí a escogerlo con anterioridad. Perdí más de cuarenta años de pendejo en Euskadi, pues aunque vivía por ratos en Madrid, como no tanto, mamá siempre me decía que mi lugar estaba en mi Vizcaya natal. Por cierto, no me gusta mucho que solo nos conozcan en el extranjero por el jodido bacalao a la vizcaína, que a lo mejor no lo inventamos nosotros, como el chicharrón de pollo no es creación de los chinos de China, según he investigado en estos doce meses…

«Te digo que aquí se goza. Este es un país de puñeteros. Y los puñeteros aparecen por todos lados, arriba, abajo y en el medio, pero los que más puñetas crean son los de arriba. Este es un paraíso para disfrutar. (Cómo he gozado al ver la foto de un inodoro en el Parque Eugenio María de Hostos, hoy tierra de nadie, como debe ser!. Me dicen que ese parque una vez fue el más bello de las Antillas, cuando se llamaba Ramfis en días que por aquí llaman duros no se por qué. )Por qué pelear, mortificarse, disgustarse, por el hecho de que marginados de la fortuna ocupen el litoral sur de la Avenida George Washington? Eso está requetebien. )Acaso los grandotes no se llevan siempre la mejor tajada, aún en esa linda avenida creada para el disfrute de todos de ustedes, partida de guanajos…

«Lo que no entiendo es eso de construir casetas para inodoros en las vías públicas. )Por qué ocultar esas obras de arte que nos envía la multinacional Standard? Además, )no es eso un atentado contra los derechos de los usuarios de ese servicio, que es más útil que el de la energía eléctrica, sobre todo de la que se ofrece en este país de encantos?…

«Como disfruto cada vez que veo a un chofer descartar eso de que doble derecha en rojo, pero cediendo el paso. )Qué ceder ni ceder del carajo? Por eso hacen muy bien quienes se meten como le sale de los timbales. Además, para eso están los policías de tránsito, para protegerles sus derechos, como se los protegen a los guardias, a los policías y a titirimundachi cuando conducen motos sin cascos de protección. Eso sí, que no se de una orden de exigir ese casco, para que usted vea, entonces, como mandan al carajo los derechos humanos. Se supone que eso se hace cuando algún turpén importa cascos y necesita venderlos. Así se hace…

«No jodan tanto con eso de que no hay luz. Ya la Superintendencia de Energía resolvió el problema, pues acaba de anunciar que repartirán los apagones. Eso es lo correcto. Este es un país tan interesante –(puñeta por que no habré venido antes!– que reparte pobreza y no se anda con la demagogia de los capitalistas salvajes de que repartirán riqueza o de los comunistas trasnochados que hablan de igualdad. No fuña nadie. (A coger pobreza! Además, eso es lo que dará por resultado, al recorrer toda el circuito, la decantada globalización…

)Que los precios suben? )Que sube la prima del dólar? )Que los medicamentos no están al alcance de la ciudadanía? )Que la situación está muy difícil y la acera dura? )Y qué? Todo eso está más bien que Lola y a la putita esa la mataron a las tres de la tarde. Por cierto, si algún día vas a Calatayud, no preguntes por las Dolores. No te sigas hartando de mantecaditos rellenos de anchoas. El pueblo no come dólares, ya que lo dijo una vez don Ramón, según he leído en la historia de tu país. No te enfermes y no tendrás que gastar en medicinas. )Qué la acera está dura? Pues camina por el medio de la calle. )Vez que todo tiene solución? Lo que no la tuvo fue eso que dijo Hipólito y que iba a agarrar a Leonelito por el pichirrí. Tenemos que seguir dando cuerda a don Benito de la Rosa y Carpio, para que la candela que lanza por la boca ese distinguido obispo mantenga en segundo plano los vejigazos del Cardenal López Rodríguez. No podemos tolerar una Iglesia unida. Lo mismito tenemos que hacer con la sociedad civil, las organizaciones patronales y profesionales. Ya acabamos con las sindicales y probamos que el anarco-sindicalismo estuvo justificado en una época pero que en el fondo también era una buena basura. No queremos orden público, porque sale muy caro mantener a sus representantes. El Estado es tremenda vaina que tenemos que achicar hasta que desaparezca. Nada de propiedad privada. Bien dicho eso de que la tierra no tiene dueño, pues originalmente era propiedad de los indios hasta que llegaron los salteadores de 1492. Que sepamos los indios no tuvieron descendientes o cuando menos no los tienen ahora…

Se viva mucho al decadente Fidel Castro, cuando debería hacerse con otra gente. )Por qué no hacerlo con Pierre Joseph Proudhon, el inmortal autor de «)Qué es la Propiedad? )Por qué no vivar al egregio Mijail Alexandrovich Bakunin, quien nos regaló su «Catecismo Revolucionario» y «El Estado y la Anarquía» y se atrevió a mandar a Marx al mismísimo carajo?…

«Lo lindo del caso es que por falta de propaganda la gente no sabe, fuera de aquí, que tienes un país encantador, donde las leyes se fueron a la porra hace más años que el carajo. (Puñeta, por que habré llegado tan tarde a este paraíso. Atentamente te saluda, y con mucho deseos de abrazarte, Paxton Etcheberri Koldochen».