Hoy 
Muy buen domingo para usted y los suyos, mi querido don Magino. Supongo que ya habrá botado la resaca del 27 aun cuando de seguro que se prepara para la del carnaval aquel. Leo, no sin cierta preocupación, que los gasolineros están que arden, pues el gobierno ha dicho que no les aumentará el margen de beneficio por sus ventas de los derivados petroleros. Y para evitar líos, se me ocurre una idea tonta: ¿no sería posible que los gasolineros prepararan un ante proyecto de ley, impositivo desde luego, y lo llevaran a las Cámaras Legislativas «para los fines de lugar». No, por nada, pero como el método no sería nuevo…
Lo bueno que tiene el Consejo Consultivo que asesorará al presidente Mejía en cuestiones económicas, lo bueno que tiene ese Consejo, mi querido Magino, es que ninguno de sus componentes defiende intereses particulares. La creación del Consejo, repito, es un buen paso…
Guy Philippe (por favor, escriban Philippe con una sola l o ele) es un muchacho de lo más travieso. Le gusta el aguardiente por pipá y celebra «triunfos» bailando con un combo en un hotel de Cabo Haitiano. Philippe, que odia al presidente Jean Bertrand Aristide, afirma que hoy estará en el Palacio de Puerto Príncipe, para festejar su trigesimosexto cumpleaños. Philippe luce uno más del montón, pero es un oficial de academia, bien preparado. Lo dominan, sin embargo, unas ambiciones tremendas, ambiciones que, más tarde o más temprano, le ocasionarán muchísimos problemas. Aquí tiene excelentes relaciones, según se afirma, y no precisamente con gente que viste de kaki por simpatizar con los uniformes de los normalistas…
Un reportaje de la televisión quisqueyana, pasado el 27 de Febrero, constituye una prueba inequívoca del justificado optimismo de tremendos lebreles. Estudiantes, muy desarrolladitos ellos, estuvieron disponibles para expresar su interpretación histórica de los hechos acaecidos el 27 de febrero de 1844. Uno solo de los estudiantes, y por chepa, dijo alguito: ¡el 27 de febrero es una fecha que se ha usado para la celebración del carnaval! Mire, Maginito, cuando usted escucha a esos «estudiantes» tiene que llegar a la triste conclusión de que muy caros cuestan al contribuyente los programas educativos de este paisote y que esos programas podrían ser remitidos a Agricultura, pues allí es que deben ocuparse de todo aquello que se relacione con los ñames. ¡Escuchando a esos pichones de doctos, tenemos que llegar a una conclusión inevitable: ¡nos jodimos!… Estados Unidos, Francia y Canadá piden la separación de Aristide del poder. Suponemos que si logran su objetivo, se harán cargo económicamente, de la reconstrucción de Haití y no vendrán con una par de pesos viejos que ni siquiera pueden resarcir alguno de los boquetitos realizados por las tropas interventoras…
¿Que agarraron a Osama Bin Laden? Mire, Maginazo, fíjese bien en éso, para que no lo confundan, pues a lo mejor atraparon al hermano del famoso terrorista. En ese caso, quien estaría preso es el comandante Bin Bin…
El Polibromero pregunta si hay necesidad de pintar la cara a militares dominicanos e indaga por cuáles motivos eso se hace. Muy sencillo, mi querido Watson: porque se la pintan los soldados gringos. Por los mismos motivos que se envían tropas criollitas a proteger la misión diplomática después que los gringos enviaron los suyos para la misma pendejada…
Dice Vicente Sánchez Baret que es casi seguro que Fello Suberví sea el candidato vicepresidencial perredeísta. Fello ha dicho y redicho que jamás sería candidato a ese cargo. Pero, Maginito, todo el mundo tiene derecho a cambiar y a bailar si la música le gusta. Y no me fuña la pista con sus cantos de sirena. Aquí todo el mundo tiene derecho a repostularse, a querer reelegirse. El único que no tenía derecho a esa pendejada era el Doctor, pero ese hombre se las arreglaba de una manera genial hasta el punto de que era el único que se reelegía y poco o nada importaba que lo hiciera dando tabla y cambimba. Total, hacía más bien que el carajo, pues al final de cuentas le hicieron `padre de la democracia`.
