Coctelera…

Coctelera…

)Cómo está don Magino? Dígame una cosa, viejo cuentista, y antes de que entremos en materia, )por dónde andará el cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez? )Como que ha extrañado mucho su silencio en la recta final del proceso electoral, después que lanzó un prolongado partido en la primera parte del mismo? )Estará fuera del país? )O serán ciertos los rumores de que tiene «problemas» con monseñor Agripino Núñez Collado? Es más, Maginito, no soy baúl de nadie y por ahí se especula que el purpurado no ha vuelto a recibir al rector universitario que tuvo que cargar muy pesadito el domingo y en los días que precedieron a las votaciones…

Mire, Maginito, siguen los rumores en cadena. Y la verdad de verdad es que la cadena que se gestaba, con los medios electrónicos de comunicación, no pudo establecerse, no solo por la voluntad de la mayoría de los magistrados de la Junta Central Electoral (JCE), sino por la radical oposición de los embajadores de Estados Unidos, Gran Bretaña, Canadá y la Unión Europea, junto a la jefa de la misión diplomática española. Que no es pendejadita. Otro revés para los carpetosos fue aquello de no poder impedir que se hicieran encuestas a «boca de urnas». Una de esas encuestas, creo que la de Penn, ya a las cinco de la tarde estaba lista y desde Madrid, tempranito en la noche, se divulgó que Leonel Fernández había ganado los comicios con un 56 por ciento de los votos válidos emitidos…

Hay que tener los timbales blindados, Maginito, para culpar a Eduardo Estrella del estrepitoso fracaso del PRSC en las elecciones. )Por qué cargarle el dado a un muchacho serio, trabajador, que a lo mejor fue utilizado por camajanes que creían en el huevo de la lechuza? )No decían que Jacinto y Carlos carecían de tropas, que se habían ido al lado de Leonel pero sin llevarse militancia alguna? El doctor Joaquín Balaguer, el líder del PRSC durante años, desde la fundación del partido hasta su desaparición física, el doctor Balaguer repetimos, siempre contó con casi medio millón de votos en sus bolsillos a la hora de ir a elecciones. Puede ser que su poder político, un tanto disperso, fuera heredado por algunos de sus seguidores. Pero lo que no se heredaron fueron los votos que él siempre tenía a buen recaudo. Tremendo error de cálculo de quienes creían que iban a hacer zafra y a darle su «boronita» al perredeísmo. Es evidente que el desplome reformista se hizo un tanto moradito y no precisamente por los chichones que dejan las caídas. Ahora Eduardo es el responsable de todo. (Buenos abusadores!…

Feroces adversarios del presidente electo Leonel Fernández, ahora por el «bien patrio», comenzaron a dar consejos al futuro mandatario. (Fenomenal!…

Maginito, el viejo amigo Max Puig debe estar de risitas, pues su Alianza por la Democracia aportó nada menos que 84,566 votos al peledeísmo triunfante. Y el Bloque Institucional que fundara el doctor José Francisco Peña Gómez, ahora capitaneado por su hijo José Francisco Peña Guaba, dio 98,278 sufragios al mismísimo peledeísmo. Pero debe aclararse que el PLD, solo, logró 1,777,377 votos, más de medio millón por encima de la cifra lograda por el PRD y sus aliados, que fue de 1,215,528. Quien se quedó cortito fue el PQD, que había prometido 100,000 votos para el perredeísmo y solo obtuvo 27,520…

La memoria, Maginito querido, no es pendejadita. Traiciona a cualquiera. Hace unos días hablaba con usted en relación a la creación de la legislación que dio origen al Banco Central así como también de la estructuración de dicho banco. Cité nombres de extranjeros y de dominicanos. Releyendo lo escrito, después de publicado, observé dos omisiones involuntarias que deploré muchísimo. Entre los que trabajaron en la preparación de los instrumentos que dieron origen al Central, olvidé al doctor José Calzada, un hombre serio, capacitado y honrado a carta cabal, quien creó también, con el apoyo del dictador Rafael L. Trujillo desde luego, la Dirección del Impuesto Sobre Beneficios. Fue su director. Calzada fue un técnico altamente cotizado, contratado en distintos países de América del Sur. Olvidé, asimismo, a un querido amigo y capaz economista, el doctor Milton Messina M., quien fuera vicegobernador del Banco Central y administrador general del Banco de Reservas. Messina, abogado de profesión, fue consultor económico durante años y también fue funcionario del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).

Publicaciones Relacionadas