Por la peligrosidad que representaría para los estudiantes, una comisión técnica del Colegio Dominicano de Ingenieros, Arquitectos y Agrimensores (Codia) aconsejó en un informe paralizar la construcción de una escuela en el sector Los Guandules, en la ribera del río Ozama, del Distrito Nacional.

Precisó que el terreno en que se construye el plantel está a menos de 50 metros de la orilla del río Ozama y colinda con la cañada de Bonavides.

El presidente del Codia, Francisco Mosquea, leyó el informe acompañado de los ingenieros comisionados Antonio Cocco Quezada, José Torres y la arquitecta Esther Morillo.

Resalta que no cuenta con un estudio hidrológico que definirá el nivel de inundaciones a que estaría expuesto el terreno ante una posible crecida del Ozama.

Señala que la construcción, donde se han invertido RD$30 millones, viola las normas establecidas en el reglamento R-023 para el diseño de plantas físicas escolares.
Sostiene que la escuela tendría enormes costos para hacerla resistente ante un terremoto, un huracán o de las aguas incontraladas.

Critica que una parte del solar reservada para la construcción de una estancia infantil es la más próxima a la desembocadura de la cañada Bonavides.
Considera que el terreno seleccionado no tiene capacidad de absorción por el alto nivel freático, como consecuencia de la cercanía al río Ozama.