Una jueza impuso medidas de coerción en contra de una pareja que fue sometida a la justicia por el Ministerio Público por su vinculación con las muertes de tres hombres en una riña ocurrida el 23 de enero pasado en el sector Las Flores.
El imputado David Febriel Hernández (Tequi) deberá cumplir tres meses de prisión preventiva en el CCR Najayo Hombres, en San Cristóbal; en tanto que su esposa Leiviana Nina Aquino pagará una garantía económica de RD$50 mil en efectivo, con impedimento de salida del país y presentación periódica ante el Ministerio Público.
Febriel Hernández está involucrado en las muertes de Narciso Lorenzo Vizcaíno (Cheito), Jairon Grullar Vizcaino y Wilkin Hernández (Guille), durante un incidente en el que además resultaron heridos Samuel Díaz Santos, José Luis Roa de los Santos y Juan Orlando Ascencio.
En un comunicado de prensa, el Ministerio Público informó que el apresamiento de Nina Aquino se produjo en el transcurso de la investigación, con orden judicial, por haber guardado las armas de fuego utilizadas en el hecho delictivo.
La jueza Loida Amador Sención impuso las medidas de coerción y declaró el caso complejo luego de que los fiscales Daryl Montes de Oca y Scarlet Morrobel demostraran la vinculación de los imputados con el hecho, con base en diferentes evidencias documentales y materiales.
Al caso también están vinculados varios hombres, hasta el momento identificados como Juan Carlito, Nicolino y Mono, además de Frankelis, Fabián, Barba Mía y Cambumbo, todos prófugos, perseguidos por las autoridades.
Conforme a declaraciones de testigos, el incidente se originó cuando los nombrados Mono, Frankelis, Fabián y otras personas hasta el momento no identificadas, quienes se hacen llamar «Los Juqueros», se presentaron al negocio de venta de bebidas llamado Jairon, del barrio Las Flores, donde rompieron una puerta y luego se marcharon del lugar.
Testigos señalan que, posteriormente, los nombrados Jairon, Nicolino, Barba Mía, Cambumbo y otras personas aún no identificadas fueron en busca de “Los Juqueros” y, sin mediar palabras, comenzaron a dispararles, acción que culminó con el saldo de muertes y heridos.
El Ministerio Público ha calificado el caso de violación a los artículos 265, 266, 295 y 304, párrafo II, del Código Penal Dominicano, y los artículos 66, 83 y 86 de la Ley 631-16, sobre Armas, Municiones y Materiales Relacionados.
El comunicado explica que en el caso concurre una multiplicidad de hechos punibles, así como una pluralidad de imputados e investigados que, en lo adelante, pueden también resultar sometidos a la justicia.