Un tribunal de Espaillat impuso medidas de coerción a una empleada del Programa de Medicamentos Esenciales y Central de Apoyo Logístico, Promese/Cal, acusada de comercializar medicamentos falsificados y adulterados.

A Rosa Emilia Encarnación Rodríguez le fue impuesta una garantía económica de un millón de pesos, impedimento de salida del país, presentación periódica y la obligación de someterse a la vigilancia del Ministerio Público (MP).

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La imputada está implicada en la comercialización de medicamentos falsificados, adulterados, vencidos, en condición de contrabando, venta de muestras médicas y productos farmacéuticos sin registro sanitario, ni autorización de las autoridades de salud.

Encarnación Rodríguez habría vendido medicamentos de uso exclusivo del Estado, a través de una farmacia clandestina, en violación a la Ley sobre Erradicación del Comercio Ilícito.