El vicepresidente ejecutivo del Centro Regional de Estrategias Económicas Sostenibles (CREES), el economista Miguel Collado, consideró ayer que un reto para el próximo año es la reducción del tamaño del Estado.

Precisó que debe de haber una verdadera eliminación y consolidación de instituciones estatales que lleven a un ahorro.

Señaló que la eliminación de instituciones del Estado conllevará una reducción de los empleos públicos.
Abogó por la reducción del clientelismo político y que este se perpetúa con el otorgamiento de un bono navideño de 1,500 pesos a tres millones de personas.

Explicó que ha aumentado la cantidad de personas que dependen del Estado y ha crecido la nómina pública.

Planteó que el país necesita un conjunto de reformas estructurales, pero que el Gobierno no ha dado señales de que se harán, empezando por el verdadero control del gasto.

Consideró que el país amerita una reforma verdadera del sistema tributario y avances mayores en la parte institucional para dar mayor garantía a los ciudadanos y a los inversionistas, locales y extranjeros, y seguir avanzando en la seguridad jurídica.

Señaló que el Gobierno necesita un equipo económico que esté comprometido con las reformas estructurales que el país debe implementar.

Agregó que esas reformas conducirán a que el país tenga mayores y mejores inversiones y empleos más productivos para que los ingresos de los ciudadanos se eleven.

Cree que como consecuencia de todas las reformas. empezando con la del gasto y tributaria, se generaría una reducción de los déficits y del endeudamiento público.

“Necesitamos una reforma en el sistema de carga para que bajen las tarifas internas y lograr mayor eficiencia en educación y saludad”, dijo.

Abogó por una reforma urgente en el sector eléctrico, sobre todo en la distribución que genera un subsidio año tras año.

Señaló que para este año se había presupuestado RD$86,00 millones de subsidio eléctrico y luego se elevó a RD$92,000 millones.

Cree que el país necesita un sistema tributario reformado que permita que la inversión extranjera no dependa de las exenciones fiscales.