“Cuando se tiene juventud desbordante, un temperamento alegre, dinámico, extrovertido, o un hogar recién conformado donde hay niños pequeños, el tipo de telas y los colores deben demostrar vida, ingenio y funcionalidad”. Con esa premisa, la asesora en decoración Raquel Araújo explica cuáles son las tendencias y las novedades para el 2004.

“Los contrastes de colores son importantes para darles más luz y vida a los espacios. En estos casos se pueden mezclar los tonos crudos con el rojo y el azul, los blancos con rojo y negro, el beige con chocolate y el azul con naranja”, agrega la experta, quien recomienda a los compradores las lonas, los cheniles en algodón y lino, los “suede” texturizados, las fibras naturales y los linos con diseños y texturas modernas.

Para los más conservadores

Quienes se resisten al cambio pueden optar por tonos básicos como el beige, los ocres y la mezcla de colores tierra que hacen juego con los muebles y accesorios clásicos. En cuanto a las telas, la asesora recomienda cheniles, viscosas y jaquars.

Si la idea es lanzarse con moda de avanzada, o se tiene un trabajo ejecutivo de amplias exigencias sociales, Araújo prefiere el verde aceituna, los vinos, los crudos y los tonos blancos, terracotas, grises, negros y dorados. “Por su parte, las mejores telas son los cheniles, los terciopelos, las organzas, las sedas, los stropichattos y las texturas modernas”.

Textiles: brillo y color

En este punto se destacan las nuevas propuestas textiles con organzas y sedas elaboradas o pintadas a mano con detalles en piqué, satín o delgadas tramas de cheniles. Surgen –además– posibilidades de contraste con tornasoles y terciopelos de texturas lisas y planas ideales para espacios clásicos y modernos.

“El 2004 viene con un brillo impresionante que contrasta con telas clásicas y modernas donde el color es muy trabajado. Vienen las panas, los velos y crepés de colores, telas con acabados de costuras dobles, ‘suede’ texturizados y cheniles en algodón y lino, algunas telas imitación rafia en chenil así como ‘suede’ con acabados en pvc o cheniles con mezcla de sedas”, señala Araújo, quien también es representante del almacén Tendencias.

“Finalmente, vale la pena destacar las borlas en cristal de murano, una clara tendencia oriental que le da un toque de elegancia y distinción a cualquier proyecto”, concluye.