Más que una dieta, es un estilo de vida en el que la comida, la salud, el humor y el intelecto van primero. Entre los alimentos mágicos, el pescado azul, las verduras y el aceite de oliva.

Para iniciar el día, despierte la mente y active el metabolismo, lo que ayudará a quemar más calorías.

Durante el desayuno.  Elija glúcidos lentos , ya que los alimentos ricos en estos compuestos mejoran el funcionamiento mental, la rapidez de la acción ante un imprevisto y la memoria por la mañana porque liberan su energía poco a poco.

Evite los glúcidos rápidos como el pan, estos alteran el rendimiento intelectual, porque no garantizan al cerebro una disponibilidad duradera de energía.

No abuse de su estómago saturándolo con quesos y otros lácteos ya que el cerebro funciona mejor en las mañanas si el desayuno lleva un poco de grasas y proteínas pues así adquiere combustible.

Haga ejercicios, ya que estos son el secreto del buen desayuno, esto le ayudará a activar el metabolismo para el resto del día y quemará calorías más rápidamente que una persona sedentaria.

En el almuerzo.  Comer según su biorritmo, porque el organismo está sometido a un ritmo biológico circadiano que lo hacen ir más lento al llegar a la mitad de la jornada y tiende a producir sueño hacia las dos o tres de la tarde.

Evite las grasas, alcoholes y glúcidos; una comida grasa acompañada de alcohol acentúa ganas de dormir, al igual que los platos ricos en glúcidos, ya sean de absorción rápida como los dulces o lenta como son: pan, pastas y tostadas. Estos alimentos reducen la tensión. Coma proteínas acompañadas de minerales. Esto le permitirá estar en plenitud de facultades durante toda la tarde y evitará los ataques de hambre de las 7 o las 8 horas, que hacen asaltar la nevera según llegue a casa y devorar cualquier cosa.

En la cena.  Para la cena es importante ingerir carbohidratos ya que favorecen el sueño y éste será sereno y reparador, lo que mejorará su capacidad de memoria lógica. No olvide que mientras está durmiendo su cerebro sigue trabajando. 

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Si come mejor, funcionará mejor

Cuide su salud

Evite los desayunos exprés, el café con un pan, de pie y de prisa, se digieren mal y si faltan los nutrientes que se exigen, surge el cansancio. Recurra a los tentempiés, es aconsejable comer una fruta a media mañana y a media tarde, tanto para compensar la bajada de glucosa como para engañar el estómago.

Aliméntese con placer, disfrute y saboree a fondo lo que come, así mejorará la digestión y su relación con la comida. Evite comer mirando la televisión, leyendo un libro o repasando apuntes.