MÉXICO. El programa con más años de transmisión en México terminará pronto, marcando la defunción de un género insólito de la comedia en la televisión mexicana que presentaba adultos —frecuentemente de edad bastante avanzada— vestidos como niños.

La cadena de televisión Televisa anunció esta semana que “En Familia” dejará de transmitirse después de más de 47 años al aire. Su último programa será el 20 de diciembre. El conductor Xavier López ha sido anfitrión del programa de variedad para niños desde que inició en enero de 1968.

Durante la larga existencia del programa, él siempre ha vestido ropa de niño —a menudo pantalones cortos u overol— y hablado con voz infantil chillona, a pesar de que actualmente tiene 81 años. López es más conocido por su nombre artístico: “Chabelo”.

El comediante confirmó el fin del programa en un mensaje grabado en su voz “infantil”: “Todo en la vida tiene un ciclo, un principio y un final”, dijo. López afirmó que podría iniciar otro proyecto, que fue no especificado. La sociedad mexicana llegó a cuestionar la en ocasiones grotesca figura de un octagenario interpretando a un niño. Críticos lo apodaron “Chabuelo”. El poeta y novelista Homero Aridjis dijo que, con Chabelo, “la educación de la niñez mexicana quedaba atascada anteriormente” después de décadas de humor meloso del programa.

El anuncio del fin del programa ocurrió casi un año después del fallecimiento del otro gran proponente del “humor de adultos vestidos como niños”, Roberto Gómez Bolaños, quien fue conocido ampliamente como “Chespirito. El programa de Chabelo no fue tan famoso en América Latina como “El Chavo del Ocho”, de Gómez Bolaños. A sus cincuenta y tantos años, Gómez Bolaños aún actuaba —vestido como un niño— interpretando al inocente héroe de buen corazón del programa, “El Chavo”.

Otros programas que aún se retransmiten en la televisión mexicana presentan actores adultos vestidos como niños escolares revoltosos. Aridjis dijo que México ha tenido siempre una relación de “amor-odio” con el género, ya que algunos los disfrutan y otros los consideran de mal gusto. “Algunos adultos en México quedaron en una etapa mental infantil y a lo mejor a ellos les gustaba, más que a los niños”, dijo Aridjis, quien agregó: “Me horroriza que le gustara a adultos”.