Aumentan los temblores en las oficinas públicas, sobre todo en los más altos niveles. Mientras la opinión pública se ocupa de lo que ocurre en el Senado con la Cámara de Cuentas y la gente de la calle se queja por los altos pasajes y la inflación en general, la gente del PLD y los dirigentes de los partidos aliados no duermen pensando en la composición del próximo gobierno. Parece que los miembros del Sanedrín del Presidente Fernández saben para dónde van y quiénes se quedarán en sus actuales puestos, pero otros están que tiritan sin que haya frío. Los aliados tienen el método de reunirse y de mandar papelitos. Otros recuerdan su votación y cada uno, en definitiva, se pone donde el Capitán Fernández lo vea.

El  choque

R. Pérez Minaya

El economista Ramón Pérez Minaya propugna porque el salario sea fijado por el mercado, sin la intervención de las autoridades. Reconoce, sin embargo, la presencia de extranjeros que laboran a precios más bajos. ¿Cómo podría darse la competencia entre obreros, entonces?

Pepe Abreu

El conocido sindicalista continúa abogando porque el gobierno y el sector privado mejoren los salarios de empleados y trabajadores. Cree que la capacidad de compra de los asalariados, menguada por las crisis y por la inflación, debe ser protegida. Cita el costo de la canasta familiar, cada vez mayor.

El  personaje

EMBAJADOR EN LA INDIA

Hans Dannemberg

Cuando la Cancillería lo suspendió pocos se enteraron, porque la nota fue publicada con bastante discreción. Pero quienes lo supieron no encontraron respuesta a la vista, además de estar sorprendidos por una medida que no es común con un embajador. Y mucho más con un embajador en un país de tanta importancia futura para la República Dominicana como es la India. Pero aparentemente el diplomático fue suspendido porque, en un gesto de lealtad hacia el jefe de la diplomacia dominicana, vino al país a votar por su Presidente. Muchos otros embajadores hicieron lo mismo, pero parece que tenían permiso de la Cancillería, o mejor suerte.