Gustan algunos funcionarios de dar un sentido plural e impersonal a los males que agobian a la nación. El último en hacerlo ha sido el secretario de Medio Ambiente, quien alegó una débil voluntad colectiva para enfrentar los desafíos medioambientales. Ya antes el jefe de la PN dijo que los dominicanos tenían la Policía que pagaban. Es decir, las fallas del cuerpo tienen su excusa en la colectividad nacional. Y de un tiempo a esta parte, el secretario de Interior gasta gran dinero en anuncios para convencernos de que la violencia de la sociedad es peor que la delincuencia. ¿Es que el síndrome de Fuenteovejuna es contagioso?
El choque
Ricardo Rosario
El sector comercial pide con vehemencia a los fabricantes de pastas alimenticias que reduzcan los precios en en vista de que el trigo ha descendido en el mercado internacional. Oídos sordos han hallado-
José Ramón Fadul
El secretario de Industria y Comercio da a entender, no obstante, que es a los comerciantes a los que hay que obligar a bajar los precios y lamenta no tener medios coercitivos para conseguirlo.
El personaje
Abogado y político
Milton Ray Guevara
La misma odiosa restricción que algunos dominicanos han vivido en otros litorales del país se está dando ahora en Samaná. El doctor Milton Ray Guevara elevó su voz contra la práctica de algunas empresas turísticas que impiden a dominicanos el acceso a lugares naturales que son públicos por definición. Nada ni nadie le puede quitar ese derecho a los ciudadanos, subrayó el jurista. Las autoridades de esa provincia deberían impedir tal discriminación, como sería necesario también que en Santo Domingo alguien pusiera fin a la práctica de impedir la entrada de personas de color a ciertas discotecas.