Hay que celebrar que los candidatos presidenciales de los dos partidos que se disputan la silla presidencial estén hablando de la importancia del campo dominicano. Porque se hace necesario, casi urgente, volver los ojos hacia nuestras campiñas. La República Dominicana nunca debió descuidar, como lo hizo, la producción agropecuaria. Porque tenemos un extraordinario patrimonio agropecuario que permite al país ser eficiente en la producción de cítricos, de aguacates, de café, cacao, tabaco, legumbres, plátanos y guineos, piña, mangos y, por supuesto, caña de azúcar. Esta es una riqueza inmensa para el mercado local y para la exportación.
El choque
Max Puig
El doctor Max Puig está presentando a la nación un discurso interesante, como candidato presidencial, acerca del curso que debe seguir la economía en el futuro. Su propuesta no está lejos de la del candidato del PLD.
Chío Jiménez
El ministro de Agricultura es citado como el funcionario que está más interesado en hacer una concesión de Merca Santo Domingo a un grupo de inversionistas privados. Sin embargo, hay mucha resistencia a este deseo.
El personaje
Presidenta Cámara de Cuentas
Licelot Marte de B.
Lo que dice doña Licelot Marte sobre los cabildos del país y la Liga Municipal Dominicana es una gran verdad. La Liga tiene la responsabilidad de entrenar a los empleados y funcionarios municipales para que registren el manejo de las finanzas de manera de adecuada, de acuerdo a los procedimientos contables generalmente aceptados. Pero la Liga no hace su trabajo. Y no lo hace a pesar del jugoso presupuesto anual de que dispone, prácticamente para hacer nada. Es una pena que sea la Cámara la que tenga que hacer una labor que otro organismo, con más recursos económicos, no ha querido hacer. Uno podría preguntarse, ¿qué hace la Liga Municipal Dominicana? Aparentemente nada. Bueno, a decir verdad, sirve para pagar servicios políticos.