Una de las grandes retrancas que enfrenta la posibilidad de desarrollo económico-social del país es la magra capacidad de compra de los trabajadores dominicanos, incluyendo a los que no ganan salarios mínimos. Pero en nada es tan empeñoso el empresario dominicano como en regatear un pago adecuado a sus empleados y obreros. Olvidan, parece, que mientras más ingresos tengan los trabajadores mejor será para sus industrias y para sus negocios… ¿Habrá dejado alguna grabación o habrá dejado algún escrito el general Pou Castro sobre los autores intelectuales del nunca olvidado talentoso periodista Orlando Martínez Howley?
El choque
Reinaldo Pared
Nadie debe soñar con desunión en el PLD. Los herederos de Juan Bosch están obligados a defender cuatro años más de buenos y bien pagados empleos, y también tienen que evitar pasar malos ratos y hasta algunos sustos.
Senén Caba
El Ministro de Salud debe desplegar esfuerzos para que se cumplan los acuerdos convenidos y firmados con el Colegio Médico. El doctor Senén Caba ha sido un dirigente cooperador y comedido frente al Gobierno. No deben incumplirle.
El personaje
Precandidato presidencial del PLD
José Tomás Pérez
Si los partidos políticos del país, sobre todo los dos grandes, quisieran hacer una precampaña verdaderamente democrática y libre de presencias extrañas, lo mejor sería que los propios partidos financiaran las precandidaturas. Por supuesto, se entiende que eso reduciría las ventajas y la capacidad de negocio de políticos que sólo aspiran para conseguir donaciones. En España, el PSOE financió a los precandidatos. Prohibió la innecesaria propaganda externa y le rentó un local a cada aspirante y le asignó un personal que financiaba el partido. Cuando José Tomás Pérez sugirió que el PLD financiara las precandidaturas estaba haciendo la más sensata y democrática de las peticiones. Debió pedir que se prohibiera la propaganda externa. En los partidos hay que limitar el poder del dinero.