El señor Felipe Martínez agradece hoy a Dios porque su hijo Natanael Martínez Benzán sobrevivió luego de ser herido de dos disparos, uno en la parte baja de la espalda y el otro en la pierna izquierda, por tres hombres que se  identificaron como policías.

Martínez Benzán fue operado ayer tarde de emergencia en el Hospital General Plaza de la Salud y luego de salir del quirófano narró que se dirigía desde el kilómetro 17 de la autopista Duarte hasta su casa y que fue interceptado por una camioneta blanca en el semáforo de la avenida Monumental por tres individuos con chalecos antibalas, quienes lo encañonaron y lo hicieron bajar de la camioneta que conducía.

El hecho ocurrió cerca de la 1:30 de la tarde.

 “Desde que me desmonté de la camioneta me dispararon en el pie. Uno me dijo dame lo que tú tienes que tú sabes lo que es”, narró el herido.

Dijo que cuando sus atacantes vieron que la gente les miraba comenzaron a preguntarle, “para que los   escucharan”, por una jeepeta BMW blanca, qué donde estaba y decían que él era un atracador.

“Desde que me desmonté uno de ellos me disparó en el pie, pero no dejaban de darme patadas y puñetazos, hasta que llegó la patrulla y uno de los policías me conoció”, agregó.

Según dijo el policía de la patrulla que llegó al lugar logró desarmar a uno de los agresores y evitar que lo mataran.

Se supo que los policías que lo agredieron, cuyos nombres no fueron suministrados,  pertenecen a la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD). Fueron detenidos y llevados para fines de investigación al destacamento de Las Caobas.

Los familiares presumen que a Natanael Martínez trataron de atracarlo y que al llegar los mirones y la  patrulla trataron de hacer parecer que él era un delincuente y que se había robado una jeepeta, pero que el objetivo eran los 31 mil pesos que cargaba en el vehículo.

La investigación la hacen   el capitán Campos y el teniente García de la división de homicidios del destacamento de Las Caobas. Se confirmó la detención de los sujetos.