ERICA GUZMÁN
SAMANÁ. Un comerciante pidió disculpas de manera pública a la procuradora fiscal de esta ciudad, tras difamarla e injuriarla luego de detener de manera irregular a un presunto delincuente que penetró a uno de sus negocios.
Ramón Antonio Taveras atribuyó su actitud al estado de desesperación en ese momento, en el que hablé a la magistrada en un tono descompuesto, por lo que hoy me retracto.
Tras el incidente, ocurrido en el Palacio de Justicia, Taveras fue detenido y sometido a la justicia por la procuradora fiscal, licenciada Agustina Castillo, en su condición de querellante.