Santiago.- La llegada del pago navideño es para Elvis Tavárez, quien atiende un pequeño puesto de venta de celulares, discos y accesorios para móviles, un poco de oxígeno para su negocio, después de un año de ver caer sus ingresos hasta casi el 80 por ciento, pero no por eso deja de sentirse «deprimido», ante el panorama que se observa en los centros comerciales.
Aunque Tavárez reconoce que este año las ventas no podrán ser tan fabulosas como en años anteriores, por los efectos de la crisis económica que existe en el país, dice que al menos confía en poder vender algo para pagar la renta y otros gastos personales.
Una situación similar enfrentan comerciantes de otros centros de compra del centro de la ciudad, donde regularmente hay un flujo mayor de personas, donde la esperanza de captar al mayor número de clientes les ha obligado a diseñar múltiples ofertas de rebajas de precios, en productos como calzado, ropa, electrodomésticos y adornos navideños.
Pese a las quejas de clientes y comerciantes, el presidente de la Asociación de Tiendas del Centro de la Ciudad, Carlos Lora, indica que tiene esperanzas de que después del 10 de diciembre las ventas mejoren.
Hemos pasado 11 meses muy difíciles y ahora estamos viendo como un movimiento que encontramos bueno a ver si se comienza a ver el cambio, dice.
Explica que hay un nuevo aire en este mes y que evidentemente dinamizará el comercio, por la afluencia de consumidores que se ha incrementado en las últimas semanas, situación que ha mejorado las ventas.
El líder gremial señaló que sin duda, el año que recién finaliza ha dejado tremendas crisis al sector razón por la que más de 10 tiendas cerraron en el año.
Para el comerciante y propietario de la tienda El Conde, Darío Muñoz, una tradición en Santiago, la crisis es tan fuerte que ni siquiera diciembre la mermaría.
Nunca habíamos vivido una crisis en nuestras ventas tan fuerte como la que estamos viviendo. Se han caído las ventas en un 90 por ciento de lo que se vendía el año pasado, afirmó.
Sostuvo que no le ve ninguna perspectiva al país, porque el problema es que no hay trabajo y no se ve ninguna acción de parte del gobierno.
Aquí estamos quebrados, no hay energía eléctrica ni circulante y entre pagos de teléfono, agua y letreros al ayuntamiento, el sector empresarial no tiene dolientes. Aclaró.
Muñoz, lamentó que se estén viviendo momentos tan horrendos cuando el país podría estar mejor, solo por el mal manejo de los fondos públicos y una mala administración gubernamental.