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Comerciantes, propietarios de vehículos públicos y privados, así como particulares, hacen uso indiscriminado y abusivo de aceras y otras áreas reservadas al peatón en el municipio Santo Domingo Oeste.
En el uso inadecuado de las aceras y otros espacios reservados al peatón participan grandes, medianos y pequeños comerciantes.
No pocos ciudadanos de Santo Domingo Oeste creen que las autoridades municipales deben ser menos tolerantes a la hora de hacer respetar las leyes y resoluciones.
Cuando salimos a la calle para ir al trabajo o realizar alguna deligencia no sabemos si llegaremos a retornar a nuestros hogares, porque permanentemente tenemos que echarnos a la calle porque las aceras están ocupadas, se las han robado, afirma la señora Hortensia Jiménez, madre de dos niños y empleada privada.
El estudiante Juan Rodríguez sostiene que las aceras, los contenes y parte de la vía son ocupadas hasta por tiendas que tienen sus locales propios, pero sacan sus artículos y los colocan en mesas que se roban todo el espacio reservado al que camina a pie.
Esa práctica se da en Pintura, Kilómetro 12, Las Palmas y en el llamado Mercado de las Pulgas, donde quien anda a pie está permanentemente expuesto a sufrir un accidente o en el peor de los casos a perder la vida, ya que tiene que lanzarse a la vía para poder transitar porque le han robado su espacio.
La situación fue expuesta por transeúntes que día a día sufren las consecuencias de esta situación y por pequeños comerciantes que alegan tienen que trabajar para mantener a su familia.
El problema no sólo se mantiene durante todo el año, sino que con el incremento de las actividades comerciales durante el final de año el problema tiende a agravarse, porque a los negocios existentes en el año se agregan los tarantines, cuyos propietarios venden productos propios de la época de Navidad y juguetes.
Deploraron que el problema no sólo es creado por pequeños y medianos comerciantes, sino por reconocidas empresas ligadas al ramo de la venta de electrodomésticos.
El síndico Francisco Peña dijo que en el caso de Pintura, el Ayuntamiento va a dejar la misma gente, aunque simple y llanamente vamos a establecer algunas casetas para que el espacio se distribuya mejor y dé un aspecto que no contamine la visión y el medio ambiente.
Síndico impotente
El síndico Francisco Peña afirmó que desaloja a los pequeños y medianos comerciantes que incurren en esa práctica para regular la situación, pero que al otro día vuelven a instalarse en el lugar. Dijo que en los días finales de año pasado no actuó porque debía darle la oportunidad de trabajar para que se ganaran con qué preparar su Nochebuena y los Reyes de los hijos, pero que terminadas esas festividades actuaría para normalizar la situación.
