POR ALEIDA PLASENCIA
El país debe actuar más rápidamente en la adopción de medidas para enfrentar el impacto que tendría el alza de los precios del petróleo en la economía dominicana, según la Asociación Dominicana de Almacenistas Importadores (ASODAI). Directivos de la ASODAI plantearon la necesidad de que en el país se determinen medidas para prevenir una posible crisis, si el precio del petróleo se mantiene en alza.

En ese sentido, hay que comenzar a tomar acciones para determinar cómo reducir la dependencia del país del petróleo, según el presidente de la ASODAI, Domingo Espinal Collado, Manuel Cabrera y Angela León, miembros de la Junta Directiva de la entidad, quienes hablaron del tema  al ser entrevistados en el Encuentro Económico de HOY.

Cabrera, por su lado, planteó la necesidad de generar energía derivada de la caña de azúcar, como etanol por ejemplo, así como por hidroeléctricas y otras alternativas.

Consideraron que al respecto hay que tomar medidas urgentes e, incluso, tratar de solucionar la situación de la energía eléctrica, de manera que se reduzca la utilización de plantas independientes. Resaltaron que la gran cantidad de plantas eléctricas de uso individual representan mayor consumo de combustibles, que si hubiera un sistema eléctrico eficiente que no fuera necesario acudir a equipos de emergencia.

Espinal Collado recordó que la República Dominicana importa más de la mitad del petróleo que importan todos los países con los cuales “estamos firmando acuerdos de libre comercio”. Los dominicanos, dijo, “debemos tener muy en cuenta que el alza de los precios del petróleo le resta competitividad a la República Dominicana y la hace inviable frente a otros países, y de ahí la preocupación que hemos expresado por los altos costos de la energía eléctrica”.

En ese sentido, estimó que el país tiene, con prontitud, que buscar soluciones que lo hagan menos dependiente del petróleo. Al respecto, abogó porque se considere seriamente la posibilidad de producir energía alternativa y combustibles no derivados del petróleo, como por ejemplo el etanol.

Igualmente, porque se cree conciencia en la población con relación a la importancia de ahorrar combustible y energía eléctrica.

Sostuvo que los altos precios del petróleo es una amenaza permanente que tiene el país, elemento que, según dijo, “pesa mucho para la economía dominicana y sus actividades”.

Sin embargo, en el país se han ido postergando las soluciones de largo plazo, y priorizando las de corto plazo. En ese sentido citó como se aprobó la Ley General de Energía y las inversiones que vinieron a raíz de ello, estaban obsoletas en sus países de origen e ingresaron a la República Dominicana buscando “un refugio y contratos leoninos”.

Resaltó el hecho de que por cada diez dólares que incrementa el precio del petróleo en el mercado mundial, representa una disminución de 1.6% del Producto Interno Bruto (PIB) para el país, lo que a su juicio es un indicativo para los dominicanos de que se imponen medidas de austeridad y disciplinas, y sobre todo, acelerar todas aquellas iniciativas que tiendan a propiciar fuentes de energía y de combustibles que aminoren la factura petrolera.

En referencia a ese mismo tema y ante la posibilidad de que por este factor las autoridades tengan que endurecer la política monetaria, Espinal Collado añadió: “ En primer lugar, creo que hasta ahora las medidas que se han estado tomando fundamentalmente son de corte monetario”.

El país, según Espinal Collado, no ha tomado medidas estructurales y por ello se requiere que la reforma fiscal que se realizará próximamente toque aspectos estructurales.