POR LLENNIS JIMÉNEZ G.
El arrabalizado mercado del barrio Los Guandules, que “se había tragado” la avenida Francisco del Rosario Sánchez, fue derribado ayer. El síndico Roberto Salcedo volvió este viernes a Los Guandules para inaugurar la primera etapa del moderno mercado que construye el Ayuntamiento y que cambia por kioskos las deprimentes casetas donde operaban 47 buhoneros.

Ayer se entregaron las primeras 37 casetas a igual cantidad de personas que dejarán de vender su mercancía debajo de improvisadas casillas, sostenidas con madera podrida, latas abiertas, pedazos de piedad y techadas de con hojas de zinc.

Salcedo llegó antes de desplomarse las viejas casetas.

Los kioskos, de colores fuertes, son de acero y plástico. Están montados en las aceras, las que fueron ampliadas y pintadas en tonos que combinan con el mobiliario. Cada comerciante podrá ubicar una silla dentro de las modernas casetas.

Visiblemente emocionado y agradeciendo la confianza depositada en el cabildo bajo su administración, Salcedo narró las veces que debió darle seguimiento al conjunto de obras que desarrolla en Los Guandules, al punto de que el pasado domingo vio el sol salir en la populosa barriada.

Afirmó que no se detendrán en la construcción de las restantes casetas, las que se serán entregas sin costo alguno, pagando la misma tasa de diez pesos diarios al cabildo y exonerada de pago del costo del contrato que deberán firmarle a la administración municipal.

Resaltó la trascendencia de los resultados conseguidos por su gestión en las políticas que ejecutan en el  Distrito Nacional, apoyado en su Plan Estratégico de Desarrollo.

Señaló que el nuevo instrumento de trabajo que rige el destino de la ciudad de Santo Domingo, permitió el proceso de saneamiento del mercado de Los Guangules, resolviendo el anhelo que por década tuvo la comunidad.

Dijo que comenzaron a desarrollar un modelo de intervención en la zona, para hacerle un entorno mucho más saludable y digno. Afirmó que el alumbrado de que fue dotada la zona, incrementa los niveles de seguridad ciudadana. Resaltó los resultados de su política de Defensoría del Espacio Público. Salcedo explicó que debieron reducir el tamaño de las isletas para disponer de mayor espacio. “Hoy estamos conjugando la defensoría del espacio público, la seguridad de la ciudad, el arbolado y también le damos un seguimiento riguroso al master plan de aseo”.

Se comprometió a enviar semanalmente bolsas plásticas para el depósito de los desechos que irán a los tanques que separan las casetas, fabricadas en grupos de tres.

CIEN METROS

Salcedo indicó que los cien metros del mercado de Los Guandules entran en lo que considera un “hecho histórico de la ciudad, en el que por primera vez generan modelos urbanos sin elementos de conflictos”.

Arrancó aplausos de los representes cuando dijo que su cabildo construye la Patria que desean los fundadores de la República.

El síndico estuvo acompañado de la vicesíndica, Alexandra Izquierdo; del secretario general, Domingo Contreras; el director de Servicios Públicos, Dámaso Piña; la directora de Gestión de Calidad, Magdalena de Mazara. El jefe del Cuerpo de Bomberos, general Oscar Guillermo García, y el director de Espacios Públicos, Julián Roa.

Así como de los regidores Eduardo Presinal, Teotiste Sánchez y Mirna Tejada. La comunidad estuvo representada por la Asociación de Buhoneros del Mercado. José A. Ferreras  fue el primero en recibir el título que lo acredita propietario de la nueva caseta, seguido de Buenaventura Brito y de Merielen E. Gómez. Confesor Castro, quien se gana el sustento de su familia vendiendo carne, desde ayer no sufrirá más las inclemencias que pasaba en la desvencijada caseta.