MANAGUA. AFP.  La aun incipiente liga nicaragüense de béisbol profesional comienza el viernes su novena temporada, en la que los Tigres del Chinandega intentarán conseguir su tercer título en un torneo «muy parejo» entre los cuatro equipos que participan.   El torneo, con 48 partidos por equipos y duración de tres meses tendrá como primeros escenarios las ciudades de Chinandega, sede del actual campeón, y Granada, subtitular de la liga en la pasada temporada.

El equipo capitalino, los indios del Boer, con cuatro galardones, y Los Gigantes de Rivas, que por primera vez toman parte en este torneo, completan los cuatro equipos en contienda.

«Será una liga muy pareja» por el nivel de jugadores locales y de extranjeros que han jugado en la liga profesional de República Dominicana, Puerto Rico, México, Estados Unidos y Venezuela, dijo a la AFP el dirigente Noel Urcuyo.

Entre las figuras extranjeras que verán acción están Yurandel de Caster y Curt Smith, ambos de Curazao y miembros de la selección nacional de Holanda, que participó en Clásico Mundial de Béisbol.   El cubano Amaury Cañazas ha jugado con varios equipos de la liga profesional mexicana, así como el dominicano José Campuzano, que también ha estado en otras campañas en Nicaragua.

El grandes ligas nicaragüense Vicente Padilla ha jugado en dos temporadas con los Tigres de Chinandega, aunque este año aún no se confirmó su participación.   También existía la expectativa de ver jugar al también jugador de Los Padres de San Diego, Evert Cabrera, quien acaba de cumplir una sanción por uso de sustancias prohibidas.

Entre los peloteros locales de experiencia y que han sido miembros de la selección nacional destacan Diego Sandino, Julio Raúdez, Dwight Britton, Ofilio Castro.   Nicaragua reanudó el béisbol profesional en el 2004, después de casi 40 años de ausencia en esta competencia, en la que busca elevar la calidad de la pelota amateur con miras a las competencias internacionales, indicó Urcuyo.

«La liga cuesta un millón de dólares», pocos equipos tienen la capacidad económica, además que el talento local joven aún no está preparado para la pelota profesional; «hay que esperar que la nueva camada (de peloteros) este lista para que haya un par de equipos más», explicó Urcuyo.

«Esta liga es de ganar, no de estar participando. Los equipos que contratan a los mejores jugadores podrán ostentar el título», indicó Urcuyo, tras considerar que Los Gigantes de Rivas, es el club mejor estructurado en la actual temporada.   Nicaragua es socio «pasivo» de la serie del Caribe donde participan República Dominicana, Puerto Rico, México y Venezuela.   «Estamos esperando que ellos algún día nos abran las puertas, como están haciendo ahora abriendo las puertas a Cuba», manifestó.