Un joven israelí ha instalado un puesto en una acera de Jerusalén para lavar los platos antes de la Pascua judía. Esta fiesta conmemora la salida de Egipto en tiempos bíblicos: un momento de liberación para los judíos, que este año tiene una resonancia especial. © Guilhem Delteil / RFI
El lunes 22 de abril por la noche comienza la Pascua judía. Los israelíes se preparan para celebrar esta fiesta religiosa en un contexto de guerra. El actual conflicto con el movimiento islamista Hamás, los enfrentamientos con el Hezbolá libanés y las crecientes tensiones con Irán estarán presentes en las celebraciones.
Por: Nicolas Benita y Guilhem Delteil
Itzhak calienta agua en una olla enorme en la acera. Durante la Pascua, todos los alimentos llamados «fermentados» están prohibidos. Ni pan, ni nada que haya fermentado. Y en casa hay que eliminar todo rastro de estos alimentos. Así que este joven, con kipá negra y tzitztit, signos de fervor religioso, montó un puesto para limpiar los platos. «Sólo podemos utilizarlos si los lavamos en agua hirviendo. Y si es un plato que se ha cocinado a alta temperatura, entonces lo limpiamos con un soplete. Sólo entonces podemos utilizar estos platos durante el festival», explica.
Un significado especial este año
Jared Cohen sale con una serie de cacerolas limpias. “La Pascua es una conmemoración de la salida de los judíos de Egipto en tiempos bíblicos», recuerda. Y para él, ese significado es más fuerte este año. «Es una liberación. Estábamos oprimidos por los egipcios y Dios liberó al pueblo judío de Egipto. Y este año tiene una resonancia especial tras el ataque de Irán a Israel y el 7 de octubre. Tiene un significado especial para nosotros», afirma Jared.
Este sentimiento es compartido por mucha gente en Israel, dice Hanna Ringel, una madre. «No creo que nadie esté celebrando su comida festiva esta noche sin pensar en el hecho de que hay más de cien rehenes que no están en casa. Estoy pensando en lo que vamos a hacer. Tengo fotos de algunos de los rehenes o voy a leer la lista con todos sus nombres. Algunos también van a añadir una silla a la mesa», concluye.