Bruselas.  La Comisión de Medioambiente de la Eurocámara se opuso hoy a un proyecto de legislación de la Comisión Europea (CE) que permite a los países comunitarios decidir si prohíben la importación y la venta de alimentos y piensos genéticamente modificados en su territorio.

Los eurodiputados consideran que la propuesta podría no funcionar y llevar a la reintroducción de controles fronterizos a nivel comercial entre los países a favor de productos genéticamente modificados y los que están en contra, informó la Eurocámara.

La resolución que rechaza la propuesta de la CE ha sido aprobada con 47 votos a favor, 3 en contra y 5 abstenciones, y será votada en el pleno del Parlamento Europeo en Estrasburgo el próximo 28 de octubre.

“Una clara mayoría en la comisión no quiere poner en riesgo el mercado único. Para nosotros, la legislación existente debería permanecer en vigor y los Estados miembros deberían asumir sus responsabilidades y tomar una decisión común a nivel de la UE, en lugar de introducir prohibiciones nacionales”, afirmó el presiente de la comisión de Medioambiente, Giovanni La Via.

“Esta propuesta entra en conflicto con los principios de una mejor regulación y transparencia que la CE ha asumido. Después de que pasáramos tantos años derribando barreras internas, esta propuesta podría fragmentar el mercado interior y conducir a una reintroducción de inspecciones en las fronteras”, señaló.

“Trabajamos todos duro para eliminar las mismas”, recordó La Via en un comunicado.

El portavoz de Salud y Seguridad Alimentaria de la CE, Enrico Brivio, indicó en la rueda de prensa diaria del Ejecutivo comunitario únicamente que “toma nota” del voto de la comisión europarlamentaria y que habrá que esperar al pleno.