El secretario de la Comisión de Justicia de la Cámara de Diputados, congresista Frank Martínez, condenó ayer el autoritarismo y  los excesos  protagonizados por agentes policiales en perjuicio de humildes ciudadanos.

Asimismo, el legislador reformista por La Romana expresó su rechazo a las denominadas redadas y adelantó que en los próximos días  presentará un proyecto de ley para corregir esa práctica  e imponer sanciones a quienes vulneren la libertad sin causa.

Consideró el parlamentario que es el momento de establecer un nuevo esquema   que implique un mayor número de policías en las calles, con una justa remuneración y  una adecuada capacitación, de manera que puedan cumplir con el “Estado de Derecho” y las “garantías fundamentales” establecidas en la Constitución, garantizando, a su vez, que ningún ciudadano sea privado de su libertad mediante el uso de las redadas, chequeos selectivos u operativos policiales.

“La Constitución vigente consagra en el artículo 40 que la libertad solo puede ser alterada por una orden de un juez competente o al momento de cometer el hecho, es decir en flagrante delito”, recordó.

Incapacidad.   Añadió Martínez que el Estado  ha sido incapaz de proveer los instrumentos institucionales para garantizar el libre tránsito a jóvenes y adultos en “una sociedad donde la regla es apresar a alguien y luego investigar”.

Lamentó la pérdida de vidas humanas en los excesos policiales sin justificación.

“La sociedad exige  que el Congreso se inmiscuya en este tema  porque la policía usa la discrecionalidad y el autoritarismo para imponer un criterio que choca con  la Constitución”, dijo.