Miami.- La Comisión Justicia Cuba instó hoy al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, a poner en marcha los mecanismos legales que permitan llevar ante la justicia internacional al líder cubano, Raúl Castro, una vez perdida la “inmunidad diplomática” que poseía como jefe de Estado del país.
Aunque la Comisión calificó la designación de Miguel Díaz-Canel como nuevo gobernante de la isla como un cambio “estético”, aseguró que el relevo en la Presidencia convierte a Raúl Castro en “sujeto de persecución” una vez salga de las fronteras de la isla.
“Pedimos al presidente Trump que en uso de las facultades que se le solicitaron con la Ley Libertad de 1996, ordene la captura de Raúl Castro y se le pueda juzgar por al menos el crimen por el que está claramente evidenciado”, dijo en una rueda de prensa el jurista mexicano René Bolio, presidente de la Comisión Justicia Cuba.
Se trata del derribo de las avionetas de la organización del exilio Hermanos al Rescate por cazas cubanos en 1996 sobre aguas internacionales del estrecho de la Florida, hecho que impulsó ese mismo año la Ley Libertad, conocida como Ley Helms-Burton. En virtud de esa ley, en la que el Congreso condena el derribo de las avionetas, la Comisión solicita al presidente Donald Trump que lleve a la Corte Internacional de Justicia a Raúl Castro, “autor intelectual y sistemático de crímenes de lesa humanidad por los que puede ser juzgado”, dijo Bolio.
La Comisión fue creada en 2017 por juristas y activistas de varios países de Europa, Asia y América con el fin de propiciar que las violaciones de los derechos humanos por parte del castrismo sean juzgadas internacionalmente. Para respaldar su petición a Trump, la Comisión iniciará una campaña de recogida de firmas entre “todos los que han sufrido el castrismo” y posteriormente enviará una misiva al mandatario estadounidense con la demanda formal de acción.
“Pedimos a Trump que aplique esta ley y se ponga de una vez a mover los mecanismos judiciales para que Raúl Castro pueda empezar a ser juzgado y condenado y sea el principio para que llegue la paz a Cuba”, aseveró el jurista mexicano. Bolio señaló como precedente el caso del dictador chileno Augusto Pinochet (1973-1990), que fue detenido en Londres por orden del juez de la Audiencia Nacional de España Baltasar Garzón, tras perder la inmunidad diplomática que la ley internacional brinda al jefe de estado de un país.
Hipólito Ramírez, miembro de la Comisión y presidente del Consejo Patriótico Dominicano, aseguró que la posibilidad de que Raúl Castro sea juzgado es “grande” y lamentó que la designación de Miguel Díaz-Canel como presidente de Cuba sirva solo “para hacer creer fuera de la isla que hay cambios».
Por su parte, la activista costarricense Milagros Méndez sostuvo que Cuba es la “raíz de los males antidemocráticos” en América Latina, y dijo que “no necesitan más países derramando sangre”, en referencia a la situación en Nicaragua. Precisamente la Asamblea de la Resistencia Cubana leyó un comunicado en apoyo al pueblo nicaragüense y a los estudiantes en el “justo reclamo” de libertad y democracia, bajo un gobierno que calificaron de “dictadura corrupta de Daniel Ortega y Rosario Murillo».
La presidenta de la Asamblea, la exiliada cubana Sylvia Iriondo, planteó la integración en un “bloque democrático” de las fuerzas de Cuba, Nicaragua y Venezuela que promueva activamente la libertad de estos países, con la intención de crear un frente que “ponga fin a las dictaduras en el hemisferio».