Los insectos buscan comida y por eso, lo primero que tenemos que tener en cuenta si se quieren eliminar de los hogares es ser escrupulosos en la limpieza, para que no estos no se vean tentados a mudarse en nuestras casas.
Y es que hay «bichos» realmente peligrosos que son capaces de transmitir enfermedades, y solo en algunas excepciones, son simplemente molestos o desagradables.
A continuación las recomendaciones que hace Ocu.org para que los insectos no vivan en su casa:
Tapar el acceso
Si ya los insectos están dentro de casa, una medida básica a realizar es buscar por dónde están entrando y tapar el acceso.
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Ubica el nido
Los nidos de las hormigas y cucarachas suelen estar en el exterior, o en las conducciones generales de la vivienda, y entran a las viviendas por pequeños resquicios que pasan desapercibidos o escapan a nuestra vigilancia, por ejemplo, detrás de muebles.
Las avispas en cambio nos molestan en el jardín o en la terraza, aunque su nido igualmente suele estar en un resquicio de la construcción, como el alero o la caja de la persiana. En este caso, nunca tapes el orificio de acceso al nido, las avispas son capaces de encontrar otro acceso y podrían hacerlo al interior de la vivienda.
Cómo evitar las colonias de hormigas, avispas o cucarachas
Recoger siempre cualquier resto de comida y ser muy escrupulosos con la limpieza en la cocina y la despensa es fundamental para evitar estos bichos en casa.
En cambio, si no aplicamos estas medidas de prevención y somos descuidados puedes llegar a convertirse en un problema, ya que estos insectos son sociales y se comunican entre ellos para informarse unos a otros de donde están las fuentes de alimento. Con que uno de los individuos encuentre comida fácil en nuestra casa, podemos esperar la visita de toda la colonia, y, por supuesto, cuantos más individuos encuentren comida, peor será nuestro problema.
Las colonias de hormigas y avispas se fundan por una reina y la clave es actuar en el momento de la dispersión para atrapar a las reinas.
En cambio, las cucarachas, pueden criar todas las hembras y buscan tanto comida como agua en el interior de las viviendas, de ahí que se encuentren tan a gusto en cuartos de baños y alrededor de canalizaciones.
En las trampas para avispas no es aconsejable utilizar cebos azucarados porque atraen a las abejas. El trozo de carne en una botella, es la trampa número uno por excelencia. Consiste en introducir un trozo de carne a la parrilla en una botella de plástico que habrás rellenado de agua por debajo. Se trata de cortar la parte de arriba y encajarla de nuevo dada la vuelta como un embudo en el resto de la botella. De esta forma el camino de entrada es fácil y en cambio desde el interior es difícil acertar con el orificio de salida al estar el cuello al revés. Lo normal es que quede aturdida y acabe flotando en el agua.
¿Y si utilizo insecticidas?
También se puede utilizar un insecticida instantáneo para insectos que se mueven atraídos por la comida y cuando la colonia ya está establecida.
En lugar de los cebos para atraer a las reinas se utilizan trampas con un insecticida mezclado que los individuos transportan al interior de la colonia donde envenenan a las larvas. En el caso de las cucarachas, puedes ponerlos únicamente por la noche y retirarlos durante el día.
Si utilizas insecticida, ten mucho cuidado y asegúrate principalmente de mantenerlos alejados de los niños.
Termitas, carcoma y polillas
Las termitas forman colonias parecidas a las hormigas, pero su preferencia por las estructuras de madera pone en riesgo la estabilidad de las viviendas de este tipo.
La carcoma es igualmente peligrosa en este sentido, pero se trata de un escarabajo y aunque no forma una colonia la infestación puede ser igualmente grave y conviene acudir cuanto antes a un profesional.
Otro insecto común es la polilla. En este caso se trata de una mariposa y los daños los generan al hacer la puesta en las prendas de lana de las que se alimentarán las larvas.