La antropóloga Tahira Vargas reveló este lunes los efectos sociales que están generando las repatriaciones de ciudadanos haitianos en diversas comunidades y barrios de República Dominicana.
Según Vargas, aunque aún no existe un estudio exhaustivo sobre la magnitud del impacto, la observación directa y el análisis de las dinámicas de convivencia evidencian consecuencias significativas en la cohesión social y la paz comunitaria.
“Aún no podemos decir que hay un estudio exhaustivo de todo el impacto social, pero lo que hemos podido identificar en los procesos de interacción muestra que el impacto ha sido significativo por varias razones”, comentó la experta.
Explicó que la población haitiana no vive segregada de la población dominicana; por el contrario, ambas comunidades comparten un tejido social en el que han surgido relaciones de solidaridad.
«Estas relaciones permiten el surgimiento de liderazgos comunitarios, especialmente de mujeres haitianas, quienes han logrado en muchos lugares el establecimiento de escuelas, mejoramiento de barrios y demás», subrayó Vargas.
Sin embargo, esta estructura social se ve amenazada por las repatriaciones.
Vargas destacó que el accionar de las autoridades migratorias, junto a la Policía Nacional y el hecho de que cualquier persona pueda «recoger» a ciudadanos haitianos, ha creado una fuerte tensión.
La antropóloga relató cómo estas prácticas violentas no solo separan familias, sino que también dejan a niños y niñas en situación de vulnerabilidad, al punto que algunos pequeños cuentan, entre lágrimas, cómo sus amigos han sido llevados, dejando a las familias desintegradas y a los niños fuera de las escuelas.
Arresto de manera momentánea presidente PRM en Pedernales por no portar cédula
Tras el arresto el pasado jueves del presidente provincial del Partido Revolucionario Moderno (PRM), Yoneyre Santana, por supuestamente no portar su cédula de identidad.
Vargas cuestionó el motivo del arresto y sugirió que la detención podría estar vinculada al color de piel de Santana, expresando con franqueza: “¿Qué hizo él para estar preso? Ser negro”.
Entiende que aunque en el país se evita admitir el racismo, la realidad es que las autoridades frecuentemente asocian a las personas de piel oscura con la delincuencia.
Además, explicó que hay personas que prefieren no llevar su cédula por miedo a que los oficiales la retengan permanentemente,.
Vargas sugirió que en el protocolo de la Dirección General de Migración (DGM) “solo falta agregar la palabra ‘perejil’ para identificar quién es dominicano o extranjero”.
«Hay casos de personas que la Policía se lo ha llevado porque la mayoría de la población es negra y eso no acabamos de entenderlo y los mismos Policía que se los llevan son negros«, añadió.
Para la antropóloga, la situación se torna paradójica, ya que incluso agentes de la Policía, quienes también son en su mayoría negros, parecen reforzar prejuicios y actitudes racistas.
Estas declaraciones fueron ofrecidas en el programa El Día.