Nuevamente aparece en el escenario mundial la temida Influenza Aviar (I. A.). El último preocupante reporte corresponde a los Estados Unidos de Norteamérica el domingo (5-3-17) ocurrencia señalada en la llamada “flyway” o Ruta Voladora Missisippi-Misouiri, con 5,970 km. que abarcan 31 estados desde el noroeste hasta el sureste, en cuatro pasajes principales que cubren más de un tercio de su territorio. Cada año millones de aves silvestres migratorias van y vienen.

Hasta el momento la zona declarada ya en cuarentena se refiere al estado de Tennessee y cabe esperar que siguiendo patrones de años anteriores, otras áreas corren peligro del contagio. En el 2014-2015 varios estados USA hubieron de sacrificar 55 millones de unidades avícolas. La emergencia sanitaria afectó seriamente su comercio internacional de pollos y huevos por casi un año.
Importante es señalar que en estos momentos se han declarado brotes de I. A en 47 de 152 naciones de Europa, Asia, África, representando el 31%. Debemos agregar el amplio Continente Americano en donde los EUA, Chile y Méjico también están afectados.
De acuerdo con dictámenes de entidades sanitarias mundiales, un país puede ser declarado restringido para el comercio de productos comestibles vegetal o animal mientras se estén reportando brotes y medidas sanitarias correspondientes.
Esta veda puede ser total o parcial de acuerdo a criterios epidemiológicos de las autoridades de cada país. Acogiéndose a ello vimos cómo recientemente los EE.UU. impusieron cuarentena a vegetales dominicanos en general, aunque las zonas afectadas se limitaron a la región este de la República Dominicana.
Por el cuadro más arriba descrito, consideramos de urgencia declarar en alerta sanitaria todo el territorio USA al menos durante los meses de corrientes migratorias de aves (marzo-abril-mayo) y consecuentemente se prohíba importar carnes y huevos de procedencia norteamericana.
Asimismo, nos permitimos sugerir a las autoridades nacionales que se encarezca a los aficionados al deporte dominicano de peleas de gallos que se abstengan de celebrar torneos internacionales y eviten seriamente la importación de ejemplares hasta mediados de año.
Otra solicitud que procede es notificarles a los deportistas de caza que no deben incursionar en países extranjeros en donde, como el caso de E.E.UU., Nicaragua, Argentina, Cuba, Europa, en cada cacería matan y manipulan miles de aves mayormente migratorias.
Medidas sanitarias adicionales deben ser implementadas, tales como:
Monitoreo aleatorio de patos migrantes en algunas lagunas del país. Mayor vigilancia epidemiológica en puertos y aeropuertos nacionales. Campaña de alerta al sector avícola. Hacer énfasis que esta posibilidad de contagio no tiene que ver con la Salud Pública de humanos.
Mientras tanto, se puede garantizar que el sector avícola dominicano mantiene suficiente capacidad de producir toda la carne blanca, pollos y huevos que el mercado demande. Inclusive, es una gran oportunidad de reajustar la presente sobre oferta nacional de estos bienes.