Los ataques de pánico forman parte de los trastornos de ansiedad y se pueden presentar en cualquier momento de la vida de un ser humano.

Heidy Camilo, psicóloga clínica del Centro Vida y Familia Ana Simó, explica que los síntomas de las crisis de pánico pueden dividirse en físicos y psicológicos. En los primeros pueden aparecer agitación, sudoración, dolor y presión de pecho, mareo, agitación y aumentó de la frecuencia respiratoria.

“Mientras que en los síntomas psicológicos están angustia, incertidumbre, creencia o idea de que va a morir, aprensión, entre otros”, señala Camilo.

Cuando una persona padece una crisis de este tipo, normalmente tiene la idea de que va a morir por estos síntomas.

Causa. “No existe una causa única o especial. Lo cierto es que un ataque de pánico se puede presentar cuando una persona excede su capacidad de respuesta ante una situación cualquiera. Es decir, si el estrés que la persona habitualmente maneja aumenta y esta persona es vulnerable a sufrir ataques de pánico”, indica.

La especialista explica que las crisis pueden durar algunos minutos, pero por la intensidad de sus síntomas la persona lo experimenta como si durase horas.
“Además es frecuente que los pacientes con ataques de pánico se presenten a las emergencia médicas con la idea y discurso de que están teniendo un ataque cardíaco”, comenta la psicóloga clínica.

Cómo manejarla. Camilo dice que lo adecuado es primero identificar si se trata de un ataque de pánico (y esto lo hace un psicólogo o un psiquiatra). Luego en psicoterapia la persona aprende a identificar cuáles situaciones le llevaron a sufrir dicho ataque, y una vez identificado el motivo, la persona aprende a manejar los “disparadores” que potencializan la ocurrencia del ataque de pánico.

La psicóloga clínica destaca que cualquier persona, sin importar la condición socioeconómica o académica, puede sufrir de ataques de pánico. “En las consultas estas crisis son my frecuentes. Se puede decir que ha aumentado la consulta por este motivo. Tanto en hombres como en mujeres”, cuenta Heidy.

¿Y si la persona afectada es un niño? La psicóloga recomienda llevarlo de inmediato a un terapeuta infanto/juvenil para evaluar si es o no un ataque de pánico.

“En sentido general, si reconoce o sospecha que ha tenido ataques de pánico, la persona debe asistir a terapia para aprender a manejar esta situación”, aconseja la psicóloga.