Pese a su antiguo origen, es increíble cómo una decoración basada en el arte pop puede modernizar, rejuvenecer y embellecer completamente un ambiente mediante la presencia de formas geométricas y colores llamativos.

Claro, una decoración pop no sólo se basa en los colores… se necesitan complementos como textiles, muebles auxiliares, cuadros tipo los de Andy Warhol y Roy Lichstein además de los infaltables de Marilyn Monroe, que son referentes del estilo pop art.

Las alfombras mullidas (pelusas), los “puff” en colores llamativos como verde manzana, azul profundo o rosa, así como los motivos florales y tribales son perfectos para decorar paredes o simplemente como motivos a estampar en telas destinadas a la tapicería, para adornar una habitación con este peculiar estilo.

Si usted quiere introducir en su hogar un toque lleno de vitalidad, frescura y colorido, claramente el estilo pop es el que estás buscando.

Para utilizar este estilo no es preciso hacer un master en decoración de interiores, basta con que le gusten los colores vibrantes y los espacios llenos de vitalidad y energía.

Este tipo de ambientes es capaz de trasmitir optimismo, alegría y muy buenas vibraciones a cualquiera, algo ideal para desconectarse después de un duro día de trabajo o para ser felices continuamente en el día a día.

¿Como nace este estilo? Como la corriente artística de la que toma su nombre, el estilo pop decorativo se basa en el movimiento pop de la década de los años 50, de la que Andy Warhol es uno de sus iconos.

La base de este movimiento era tomar elementos de la cultura popular y de esta forma huir de los movimientos clásicos del arte.

Y eso es precisamente lo que busca un interior de estilo pop, introduciendo colores y más colores, y combinando elementos retro con otros modernos.