Las ofertas de empleo falsas son muy comunes. Las mismas pueden llegar a través del correo electrónico, vía spam, en LinkedIn o por WhatsApp.
Muchas de estas ofertas llegan como oportunidades demasiado buenas para ser verdad, donde supuestos reclutadores prometen buenos ingresos sin exigir muchos requisitos, pero generalmente se trata de modelos de engaño similares a las estafas piramidales o esquemas ponzi.
ESET, compañía líder en detección proactiva de amenazas, advierte que el objetivo puede ser quedarse con el dinero de quienes buscan empleo u obtener sus datos para intentar robar su identidad.
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Camilo Gutiérrez Amaya, Jefe del Laboratorio de Investigación de ESET Latinoamérica, asegura que: “Los delincuentes que contactan a distintos usuarios obtienen la información de portales de empleo, de perfiles de LinkedIn o de una base de datos robada o comprada en algún foro clandestino. Gran parte de nuestra información es pública”.
Según ESET, hay algunas señales que suelen indicar que se está ante un intento de fraude. La falta de personalización del mensaje; La falta de información sobre el empleo y sin requisitos; los beneficios excesivos y la atención con la dirección de origen son algunas de ellas.
También el pedido de datos en exceso datos y el tratamiento de generar un vínculo con el propósito de parecer fiables y despertar la confianza de sus víctimas, los mensajes buscan agradar a su destinatario.
Para ESET son cinco señales de que una oferta es falsa: Que una compañía prestigiosa publica sus búsquedas laborales en un sitio poco confiable o de baja reputación. Se promociona como una entrevista pero el correo no está dirigido con nombre y apellido. La entrevista se hará por chat o incluso videollamada. La oferta parece real pero no se especifica claramente cuáles serían las tareas
Y ofrecen una gran cantidad de dinero por un puesto de baja categoría o de tareas misteriosas.
“Es importante que mantenerse alerta para prevenir estafas como esta. Después de todo, es útil tener siempre en mente que no todo lo que brilla es oro”, concluye Gutiérrez Amaya de ESET.